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Un tutorial divertido para hacer el icónico dragón de Gardner y sorprender a niños y adultos con su increíble efecto óptico.
Si te gustan los proyectos creativos y entretenidos para compartir con los más pequeños (o para desafiar tu propia imaginación), hoy te traemos una idea perfecta para cerrar con broche de oro cualquier celebración: cómo hacer un Dragón de Gardner. Se trata de una figura de papiroflexia 2D que genera un asombroso efecto óptico, simulando que la cabeza del dragón te sigue a donde quiera que vayas.
¿Qué es el Dragón de Gardner?
El Dragón de Gardner es una creación basada en una ilusión óptica atribuida al matemático y escritor Martin Gardner, conocido por su fascinación con los juegos matemáticos y rompecabezas. A primera vista, el dragón parece una simple figura de papel, pero al observarlo desde diferentes ángulos, da la impresión de que su cabeza se mueve, siguiendo los movimientos del observador. Este fenómeno se debe a la forma en que se pliega el papel, engañando al cerebro y creando una experiencia única y entretenida.
A continuación, te mostraremos cómo hacer tu propio Dragón de Gardner en casa, paso a paso.
Materiales necesarios
Para este proyecto, no necesitarás materiales complicados. Aquí tienes lo que necesitas para crear tu propio Dragón de Gardner:
- Una ilustración del Dragón de Gardner. Puedes descargar una plantilla en PDF desde aquí.
- Una impresora a color (si no tienes, también puedes imprimirlo en blanco y negro y colorearlo a mano).
- Tijeras o cúter para recortar la figura.
- Pegamento en barra o cola blanca.
- Una superficie plana y limpia donde puedas trabajar cómodamente.
Paso 1: Imprimir la ilustración
El primer paso es descargar la ilustración del Dragón de Gardner y imprimirla en una hoja tamaño A4. Es importante que utilices una impresora de buena calidad para que los detalles del dragón se vean claramente. Si no tienes una impresora a color, también puedes usar una en blanco y negro y luego colorear la figura con tus propios colores para darle un toque personal.
Paso 2: Recortar la figura
Con la ilustración impresa, utiliza tus tijeras o un cúter para cortar con cuidado alrededor del borde de la figura. Es importante que no cortes las pestañas que se encuentran a los lados del rostro del dragón, ya que estas serán esenciales más adelante para montar la estructura correctamente.
- Consejo: Si usas un cúter, asegúrate de trabajar sobre una superficie segura para evitar daños.
Paso 3: Doblar las pestañas laterales
Una vez que hayas recortado la figura, sigue las líneas de pliegue indicadas en la ilustración original. Comienza por doblar las pestañas laterales hacia adentro, que son los bordes ubicados cerca del rostro del dragón. Estas pestañas son las que permitirán mantener la estructura firme cuando la pegues.
- Aplicación de pegamento: Una vez dobladas las pestañas, aplícales un poco de pegamento para que se fijen bien. Presiona suavemente para que queden adheridas sin arrugar el papel.
Paso 4: Doblar la base
La parte inferior del dragón incluye una base plegable que le dará soporte y estabilidad a la figura. Dobla la base hacia adentro, siguiendo las líneas marcadas, y asegúrate de que quede bien firme. Esta base también servirá como el lugar donde unirás las aletas laterales del dragón.
- Punto importante: Haz el pliegue con precisión para que el dragón se mantenga en pie correctamente.
Paso 5: Unir las aletas laterales
Después de doblar la base, es momento de trabajar con las aletas laterales. Estas son las partes que le darán volumen a la figura y permitirán que la estructura del dragón cobre forma. Dobla las aletas laterales y pégalas en la base. Asegúrate de que queden bien ajustadas y firmes para evitar que el dragón pierda estabilidad.
- Vista trasera y vista inferior: Una vez que las aletas y la base estén unidas, revisa la parte trasera y la base del dragón para asegurarte de que los pliegues y el pegamento estén bien colocados. Si todo está correcto, la figura debe mantenerse en pie.
Paso 6: Crear los pliegues en la cabeza
Ahora llegamos a la parte más interesante y delicada del proceso: los pliegues de la cabeza. Estos pliegues son los responsables de crear el efecto óptico de seguimiento que hace que el dragón parezca mover la cabeza contigo.
- Instrucciones precisas: Sigue las indicaciones de la ilustración original para realizar los pliegues en la cabeza. Los puntos clave estarán claramente marcados, y deberás doblar en las direcciones correctas para lograr el efecto deseado.
- Consejo: Si te resulta complicado, utiliza una regla para ayudarte a hacer los pliegues más precisos y evitar errores que puedan distorsionar la ilusión.
Paso 7: Comprobar el efecto
Una vez que hayas hecho los pliegues en la cabeza, tu Dragón de Gardner estará listo. Colócalo sobre una superficie plana y comienza a moverte lentamente de un lado a otro. Si seguiste todos los pasos correctamente, deberías notar que la cabeza del dragón parece seguirte mientras te desplazas. Este es el famoso efecto óptico que ha hecho del Dragón de Gardner una figura tan popular entre los fanáticos de las ilusiones ópticas y los juegos matemáticos.
Conclusión: Un proyecto que encanta a todas las edades
El Dragón de Gardner no solo es un proyecto fácil y divertido de realizar, sino que también es un excelente ejemplo de cómo el arte y la ciencia pueden combinarse para crear algo verdaderamente sorprendente. Este tutorial es perfecto para hacer en casa, en una clase o en cualquier actividad recreativa, y el resultado final seguro impresionará tanto a los niños como a los adultos.
¿Te animas a crear tu propio Dragón de Gardner y sorprender a tus amigos con su magia visual?