Durante el 2020 el mundo entero se enfrentó a cambios que, para la época, se pensaba que solo serían posibles en las películas. Con la pandemia de Covid-19 se tuvieron que introducir nuevas dinámicas en la vida de todos. El teletrabajo y los estudios en línea fueron las principales.
Por las restricciones establecidas para evitar los contagios y la propagación del virus, fueron muchos establecimientos los que tuvieron que adoptar dinámicas que involucraran el trabajo y las reuniones en línea. De hecho, la empresa Zoom Video Comunications Inc. creadora de plataforma de Zoom, que fue una de las que principalmente se utilizó para llevar a cabo el trabajo y los estudios en línea, obtuvo gran cantidad de ganancias durante el 2020 y hasta la fecha por su gran demanda.
La pandemia por Covid-19 trajo, sin duda, muchas consecuencias negativas en muchos aspectos. En el sector social y económico, fueron muchas las personas que se vieron perjudicadas, ya sea por la pérdida de familiares y seres queridos o por la pérdida de sus trabajos. Sin embargo, muchas otras empresas e instituciones pudieron sobrellevar la situación tan desastrosa que esto significó al expandir sus opciones en línea.
Distintas Universidades y colegios decidieron invertir no solo en plataformas que permitieran estudiar en línea, sino en la creación de cursos y programas que las personas pudieran realizar desde sus casas o desde cualquier parte del mundo. A partir de esta situación, que se prolongó más de lo que muchos tenían planeado, los cursos en línea fueron tomando mucha más popularidad e importancia.
Hoy en día, varias empresas han cambiado su modalidad de trabajo al teletrabajo a tiempo completo o a una mezcla de trabajo presencial y desde casa. Asimismo, escuelas y universidades realizaron incluso más cursos certificados que permitieran a las personas formarse y ser mucho más productivas desde cualquier parte del mundo. Universidades como la de Copenhague, Oxford y plataformas de cursos en línea como Coursera tienen a disposición cursos que se pueden tomar cuando la persona lo desee y tomándose el tiempo que esta necesite.
Algunos de estos cursos pueden ser gratuitos, sin embargo, para otros que requieren mucha más dedicación y emiten certificados que otorgan ECTS es necesario pagarlos. Por ello, muchas entidades financieras, bancarias y no bancarias, pusieron a disposición distintas facilidades para la aprobación y solicitud de sus productos, ya que esto ayudaría no solo a la situación económica en general, sino también a la obtención de, por ejemplo, cursos online para aquellas personas que no pudieran pagarlos por su propia cuenta sin perjudicar su presupuesto. De modo que, muchos estudiantes decidieron optar por cursos formativos de tópicos que antes ni pensarían ni siquiera en estudiar, como economía e inversiones, para pagarlos a través de, por ejemplo, créditos rápidos que les permitieran estudiar y pagar el curso poco a poco.
Si bien los cursos y las plataformas en línea siempre han estado disponibles desde incluso mucho antes de la pandemia, no fue sino hasta el 2020 cuando realmente se valorizaron y utilizaron mucho más que nunca. De hecho, se estima que de ahora en adelante sean muchas las empresas, universidades y colegios que promuevan las actividades en línea.