(Donestsk/Ucrania/Agencias) Es probable que el ataque con mortero contra un trolebús, en el que han muerto al menos ocho civiles y posiblemente hasta 15, cometido en Donetsk, controlada por los separatistas prorrusos, constituya una violación del derecho internacional humanitario, por lo que debe ser investigado sin demora e imparcialmente, ha declarado Amnistía Internacional en un comunicado.
“Esta atroz pérdida de vidas civiles es otro recordatorio de las consecuencias mortales de ignorar las normas del derecho internacional humanitario. Esta posible violación de las leyes de la guerra debe investigarse forma inmediata, exhaustiva, imparcial e independiente”, afirmó Denis Krivosheev, director adjunto del Programa Regional para Europa y Asia Central de Amnistía Internacional.
“No deben usarse morteros en zonas civiles densamente pobladas. Todas las partes de este conflicto conocen bien el coste en vidas de civiles del uso en de armas explosivas tan imprecisas en las ciudades. Este ataque muestra una cruel indiferencia hacia la vida de los civiles y las leyes de la guerra”.
Las autoridades de facto de Donetsk afirmaron que las fuerzas favorables a Kiev habían usado un lanzamorteros móvil improvisado dentro de la ciudad para el ataque, pero Kiev negó su responsabilidad por el incidente. El misil alcanzó un trolebús con pasajeros en la calle Kuprina, en el distrito de Leninsky, y causó daños visibles en los edificios de alrededor.
Los vídeos y fotografías difundidos en las redes sociales tras el ataque muestran el trolebús con las ventanillas rotas y siete cadáveres dentro, algunos de ancianos. En las inmediaciones se pueden ver un coche quemado y edificios sin ventanas. El conductor de un tranvía que pasaba por el lugar resultó también herido, así como un hombre que iba en otro vehículo próximo. Se ve el vehículo y el asfalto de alrededor llenos de sangre y señales de metralla.
A unos 500 metros del lugar del ataque hay una antigua base militar soviética que, según fuentes locales, están usando las fuerzas separatistas prorrusas y podría haber sido el objetivo al que estaba dirigido el mortero. Fuentes oficiales ucranianas han negado su responsabilidad y han culpado a los separatistas del ataque.
El ataque se cometió a las 8:30 de la mañana del día de ayer, horas después de que las fuerzas favorables a Kiev reconocieran que los separatistas se habían hecho con el control del sitiado aeropuerto internacional de Donetsk.
Fuentes de la ciudad dijeron a Amnistía Internacional que el ataque se produjo cuando la gente se dirigía a sus quehaceres diarios y que la noche anterior había sido más tranquila que los días previos.
El incidente ha ocurrido después de un notable aumento de las muertes de civiles en medio de la intensificación de los combates en los últimos días, que incluye el ataque contra un autobús de pasajeros de Vonovaja el 13 de enero, en el que murieron 12 civiles y resultaron heridos 16.
Al situar tropas, armas y otros objetivos militares en zonas residenciales, usar éstas como puestos de tiro y lanzar artillería, cohetes y morteros contra estos lugares, los separatistas prorrusos y las fuerzas gubernamentales ucranianas están poniendo en peligro a la población civil, lo que vulnera las leyes de la guerra.
“Ninguna de las dos partes está adoptando las precauciones necesarias que prescribe el derecho internacional humanitario para proteger a la población civil. Mientras los combates se intensifican y el alto el fuego acordado en septiembre de 2014 se desmorona, el respeto a las leyes de la guerra y la rendición de cuentas por parte de quienes las violan es más importante que nunca. Los civiles seguirán siendo víctimas de homicidios ilegítimos y de heridas en números aún mayores si se continúa sin hacer nada para poner freno a la impunidad”, dijo Denis Krivosheev.
Amnistía Internacional ha recibido informes preocupantes según los cuales más de una decena de combatientes favorables a Kiev prisioneros fueron obligados a desfilar ante la población local en el lugar donde se produjo el ataque esta mañana. Los medios de comunicación han difundido un vídeo en el que se ve cómo pegan al menos a uno de ellos. Los malos tratos a prisioneros son una violación del derecho internacional humanitario.
Cientos de personas han perdido la vida desde que se anunció el alto el fuego en septiembre de 2014, y ambas partes realizan cada vez más ataques de represalia. En total, alrededor de 5.000 personas han muerto desde que estalló el conflicto el año pasado.
VLCNoticias|Redacción