Valencia Noticias | Agencias.- El Parlamento de Hungría aprobó ayer lunes varias leyes que permiten emplear a las fuerzas del Ejército para apoyar el trabajo de la policía en la vigilancia de las fronteras durante la actual crisis de los refugiados.
Los soldados podrán utilizar armas no letales y métodos coercitivos, comprobar la identidad y participar en el control fronterizo, así como bloquear carreteras o limitar el tráfico.
La ley también autoriza a los soldados el uso de material antidisturbios como pelotas de goma y gas lacrimógeno, pero sólo podrán usar sus armas de fuego si su vida corriese peligro.
A falta de un día para la cumbre europea sobre la crisis migratoria, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon afirmó estar “extremadamente inquieto” ante el panorama que aborda la Unión.
“Amenaza brutal”, según Orban
Los migrantes representan una “amenaza brutal” para la Unión Europea, ha afirmado este lunes el primer ministro húngaro Viktor Orban en el parlamento.
“Los migrantes no solo están golpeando, sino rompiendo las puertas sobre nosotros. No unos centenares, ni unos miles, sino cientos de miles, incluso millones, cercan las fronteras de Hungría y de la Unión Europea. No atisbamos el final de esto. Detrás vienen muchos, millones se preparan para el viaje”, clamó Orban ante los diputados húngaros.
La semana pasada, la policía húngara usó gases lacrimógenos para contener la masa de migrantes que intentaba atravesar la frontera con Serbia. La violencia de los choques provocó la condena de Naciones Unidas.
Es nuestra arma para acabar con la impunidad de los más poderosos.
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