El incendio forestal que se inició en Villanueva de Viver, Castellón, hace 15 días, sigue controlado pero aún no ha sido extinguido. Las autoridades indicaron que dos unidades de bomberos forestales de la Generalitat, junto con dos autobombas y un capataz coordinador del Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón, están trabajando en la zona para controlar y extinguir los últimos focos del incendio. Este incendio ha afectado a 4.700 hectáreas de gran valor ecológico y más de 50 kilómetros de perímetro, lo que ha llevado al desalojo de varios municipios en la zona.
El incendio de Villanueva de Viver comenzó el 23 de marzo y, aunque se ha mantenido bajo control, ha sido un duro desafío para los bomberos debido a la complejidad del terreno y la fuerza del fuego. Las labores de extinción han sido complicadas por los vientos, que han avivado las llamas y las han propagado con rapidez. Además, la falta de lluvias y las altas temperaturas de los últimos días también han contribuido a que el fuego se mantenga latente.
El incendio ha sido un grave desastre ecológico para la región, ya que ha destruido miles de hectáreas de bosques y montes, incluyendo áreas de gran valor natural y ecológico. Las autoridades y los especialistas advierten de que la recuperación de los ecosistemas y la fauna afectada puede llevar años, si no décadas, y que el impacto ambiental del incendio podría ser irreparable.
Las causas del incendio todavía no están claras, aunque se sospecha que pudo ser causado por la imprudencia humana o el mal tiempo. Las autoridades han llamado a la prudencia y la responsabilidad en la prevención de incendios forestales, especialmente en épocas de sequía y altas temperaturas como la actual. Además, han destacado la importancia de la colaboración ciudadana en la detección precoz de incendios para poder actuar con rapidez y evitar situaciones como esta en el futuro.