El Levante UD de Joaquín Caparrós no tuvo ninguna oportunidad en el feudo culé. Demasiados estrenos azulgranas como para poder mostrar algo de fútbol. El resultado que reflejaba el marcador del Camp Nou a la finalización del primer tiempo hablaba por sí solo del vendaval que pasó por encima de los granotas: 6-0.
No había dado ni tiempo a que el público del Camp Nou se sentaran cuando el chileno Alexis se reivindicó ante su parroquia marcando el primero. Y el equipo gris de la gira asiática dejaba su lugar a la orquesta que dejó en su día Guardiola, tocando una auténtica sinfonía de fútbol que destruye al rival en todas las facetas, incluída la psicológica. Si no, a ver quién es el valiente que se rehace de recibir media docena de goles en sólo 45 minutos.
Pero sigamos el relato del partido por orden cronológico: Messi y Pedro comenzaron a entenderse y gracias a una pared magnifica de ambos, se estrenó el argentino en la Liga. Mientras el Levante intentaba encontrar la forma de traspasar la línea de medio campo, debido a una ejecución casi perfecta del concierto de presión del compositor Guardiola, Dani Alves primero y Pedro después agrandaban la ventaja del Barça hasta el 4-0. Tan sólo había transcurrido media hora de juego y los jugadores levantinistas ya deseaban el pitido final.
El estadio azulgrana se engrandeció, igual que su equipo, a la vez que se iba empequeñeciendo un Levante que sólo podía intentar guarecerse en su defensa, sin demasiado éxito, por otra parte. Las andanadas culés se convertían en peligro inminente una sí, otra también. En una de éstas, Pedro López pisaba a Adriano y el colegiado señalaba la pena máxima que se encargaba de transformar Messi. El eterno Xavi redondeaba el ‘set’ antes de acabar la primera parte a pase de Cesc, omnipresente director de orquesta junto a Messi de un inconmensurable Barça… y todo sin Neymar -todavía convalenciente de su anemia-, Iniesta ni Jordi Alba -recién llegados del amistoso de la selección en Ecuador-.
Quedaba toda una segunda parte para seguir sufriendo, pero el ‘Tata’ Martino, consciente de la inmensa distancia entre su equipo y el rival, reservó a sus piezas maestras de cara al partido de Supercopa contra el Atlético. En el minuto 73, por si había poco, llegaba el séptimo gol de las botas de Pedro, con lo que el Levante se llevaba la derrota más abultada de su historia en Primera.
Entraba Neymar a falta de media hora para el final, sólo para recibir su primera tarjeta amarilla en la Liga española. Diez minutos estuvo en el campo junto a Messi, que fue lo que tardó en sustituirlo Martino. Poco más. Caparrós, en su rueda de prensa, casi se limitó a hacer el chiste de la semana: “Para nosotros ha sido mucho para empezar. Nosotros ya hemos salido del dentista, que pase el siguiente. Ya a la próxima podíamos jugar contra el Madrid para quitárnoslo de encima. Sentarse aquí en esta sala de Prensa siempre es jodido, y más con el saco que nos han metido”.
VLC Noticias / Javier Furió. Fotos: Jorge Ramírez / Levante UD