En el reciente estreno de la película Barbie, Dua Lipa acaparó todas las miradas con su espectacular “naked dress” diseñado por Bottega Veneta. Este traje transparente y brillante no solo dejaba al descubierto su ropa interior, sino también su ausencia, mostrando su impresionante figura esculpida a través de horas de ejercicio, yoga y una alimentación completa y natural. Su elección para este evento ha generado diferentes interpretaciones, desde considerarlo como un reclamo hasta una reivindicación. Sin embargo, la sección de comentarios en sus redes sociales se ha llenado de críticas hacia su elección para la premiere de una película dirigida a un público infantil como Barbie, a pesar de que en Estados Unidos se considera apta para mayores de 13 años.
La pregunta que surge es si mostrar los pezones en la alfombra roja es un acto reivindicativo. El movimiento “free the nipple” o “liberación del pezón” existe desde hace años, pero cada pequeño paso que se da en esta dirección parece generar escándalo. En el verano de 2022, Florence Pugh utilizó un vestido transparente de Valentino (de color rosa Barbie, precisamente), lo que provocó una gran controversia. Ante esto, ella respondió: “Cuando me puse este increíble vestido de Valentino, sabía que habría comentarios”.
Sin embargo, el verdadero escándalo no fue tanto por mostrar los pezones de una actriz nominada al Oscar, sino por su cuerpo, que parecía molestar a algunos críticos. Florence Pugh expresó: “Muchos de vosotros queríais hacerme saber cuánto estabais decepcionados con mis ‘tetas enanas’ o cómo debería estar avergonzada por ser tan ‘plana’. He vivido en mi cuerpo durante mucho tiempo, soy plenamente consciente de mi talla de pecho y no me da miedo”. Esto demuestra que la reivindicación no se limita solo a la exposición de los pezones, sino que también se trata de dar espacio a diferentes tipos de cuerpos y desafiar los cánones de belleza establecidos. En el caso de Dua Lipa, cuyo cuerpo se considera plenamente armónico con los estándares actuales de belleza, la reivindicación puede no aplicar de la misma manera.
¿La desnudez femenina sigue siendo un reclamo? En el caso de Dua Lipa, su aparición en la película Barbie como sirena y su contribución a la banda sonora la convierten en una clara promoción de la película. Mientras tanto, Margot Robbie ha lucido estilismos icónicos inspirados en la muñeca Barbie, lo que indica que se buscaba generar polémica en la agresiva campaña de marketing de esta producción dirigida por Greta Gerwig. Es evidente que el público que ha prestado atención a los looks vintage de la película no es el mismo que se escandaliza por la visibilidad de los pezones. En este sentido, la estrategia de generar controversia ha sido exitosa.
Es importante destacar que la desnudez como reclamo no se limita solo a la figura femenina. En TikTok, se volvió viral el minuto exacto de la serie “Sexo/Vida” en el que el actor Adam Demos aparece desnudo. La red social se inundó de videos de reacciones de los usuarios al encontrarse con genitales masculinos sin contexto, lo cual resulta menos habitual que la exposición de los pechos femeninos. Esto demuestra que el reclamo no se limita exclusivamente a la desnudez femenina, sino que puede abarcar diferentes aspectos del cuerpo humano.
¿Por qué el ir medio desnuda se convierte en un “fashion statement”? En 2014, Rihanna asistió a la alfombra roja de los premios CFDA luciendo un vestido transparente cubierto de cristales de Swarovski. Esta aparición marcó el inicio de una nueva era para el “naked dress”. Aunque esta tendencia siempre ha existido, ha estado reservada a las más arriesgadas en el mundo de la moda. Marilyn Monroe, probablemente, fue una de las primeras en lucir una versión de esta tendencia. En 1962, Kim Kardashian llevó un icónico vestido diseñado por Bob Mackie en la Met Gala de 2022. A lo largo del siglo XX, otras celebridades como Jane Birkin, Kate Moss, Cher e incluso Rose McGowan en 1998 han lucido esta tendencia en diferentes ocasiones.
Según la Real Academia Española (RAE), la moda se define como el gusto colectivo y cambiante en lo relativo a prendas de vestir y complementos. Sin embargo, aquellos que se dedican profesionalmente a esta industria consideran que esta definición no abarca completamente el aspecto artístico de la moda y la costura. La moda es una manifestación de la actividad humana y puede considerarse un arte en sí misma. Nada es más artístico que provocar impacto a través de prendas que desnudan en lugar de vestir. Esta contradicción es lo que causa sorpresa y genera reacciones tanto positivas como negativas en el espectador, pero nunca indiferencia.
En conclusión, el “naked dress” de Dua Lipa continúa generando un efecto impactante en el público y se mantiene como un verdadero “fashion statement”. La discusión sobre si es un reclamo, una reivindicación o simplemente una moda sigue abierta, pero lo cierto es que esta elección sigue captando la atención de millones de seguidores y demuestra que la moda puede ser una poderosa herramienta de expresión y provocación.
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