Valencia Noticias | Redacción.- El Pleno del Ayuntamiento respaldó hoy la propuesta del concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, para modificar la plantilla del Ayuntamiento, de cara a actualizar determinados puestos de trabajo a las necesidades actuales de la sociedad valenciana, bajo la premisa de una gestión más eficaz y moderna.
La modificación supone, en palabras de Campillo, “un paso adelante en la modernización de la gestión del personal de este Ayuntamiento”, y permitirá disponer de personal especializado en turismo, igualdad, cooperación, riesgos laborales, o auditores de gestión, entre otros. Así lo ha explicado el delegado durante el debate de una propuesta que ha sido respaldada por el Equipo de Gobierno y el Grupo Ciudadanos, y rechazada por el Grupo Popular.
El concejal popular Vicente Igual critícó la medida que, ha asegurado, “llevará a la plantilla del Ayuntamiento a la situación de principios de los noventa, y con una situación jurídica no estabilizada”. Igual ha asegurado que la gestión de personal “no tiene ideología; es mera gestión”, y ha criticado que la modificación incluya la incorporación de asesores. Este aspecto también ha sido denunciado por el concejal de Ciudadanos Narciso Estellés quien, pese a reconocer las necesidades de la plantilla, ha afirmado que “no es el momento adecuado”.
A todo ello ha respondido el concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, con una defensa de la ideología en la gestión del personal: “claro que la gestión del personal responde siempre a una ideología y la del PP se apoyaba en los recortes y la recortar y disminuir la plantilla, y en la privatización de los servicios públicos”, ha afirmado.
Campillo recordó cómo, en el año del nuevo equipo al frente Gobierno Municipal, ya se han impulsado numerosas iniciativas dirigidas a reponer muchos puestos perdidos de la plantilla, especialmente en el área de Seguridad (96 policías y 134 bomberos menos sólo entre 2010 y 2016). Y, además, por primera vez en 10 años se ha realizado una oferta de empleo público.
“Nosotros estamos recuperando una plantilla adaptada a las necesidades de este Ayuntamiento y de esta ciudad, y aún vamos a impulsar más acciones”, ha asegurado el concejal. De hecho, Campillo ha agradecido a las secciones sindicales la firma, ayer mismo, del preacuerdo del convenio laboral del personal municipal para los próximos años, “un acuerdo que es el de la recuperación de los derechos laborales”, aseguró.
Preaceurdo unánime del convenio laboral con los sindicatos
El Ajuntament de València y todas las organizaciones sindicales de la Mesa conjunta de personal funcionario y laboral (UGT, CSIF, STAS-IV, SPPLB y CCOO) han llegado a un preacuerdo laboral para los más de 4.700 trabajadores y trabajadoras de la administración. Se aplicará tan pronto como sea ratificado formalmente por el Pleno del ayuntamiento y también por los sindicatos en sus respectivas asambleas. Su vigencia se extenderá hasta 2019. El Govern de la Nau lo califica como “el acuerdo del cambio y de la recuperación de derechos laborales”.
“El Acuerdo del Cambio contribuye al objetivo focal de este gobierno municipal de ofrecer a la ciudadanía unos servicios públicos con calidad, eficacia, eficiencia y con atención a sus demandas. Lo hace con un esfuerzo constante para mejorar la adaptación de las estructuras del Ajuntament de València, de sus métodos de funcionamiento, la profesionalización de sus trabajadores y trabajadoras y de la gestión de su personal como principal activo para garantizar el derecho de la ciudadanía a una buena administración”, ha explicado el concejal de Govern Interior, Sergi Campillo.
El Acuerdo del Cambio propone actuar fundamentalmente en la desprecarización de las condiciones laborales de los trabajadores y trabajadoras municipales, la estabilización y la consolidación, la promoción de la carrera profesional, la innovación, la productividad y la motivación del personal. “Se trata de unas condiciones innovadoras diametralmente opuestas a la nefasta política de personal llevada a cabo por los gobiernos sucesivos del Partido Popular en nuestra ciudad, basada en los recortes, los ajustes, las reducciones, las supresiones y las extinciones”, ha afirmado Campillo.
El texto acordado supone un cambio de paradigma respecto al anterior convenio de 2012, “cuya única garantía era no despedir a ningún trabajador o trabajadora”, ha explicado el concejal.
La plantilla del Ajuntament de València es de 4.713 empleados y empleadas (a fecha de 1 de enero de 2016) y supone el 9,4 por ciento del personal municipal en todo el ámbito autonómico. “Queremos que este ayuntamiento sea un referente en todo el Estado en cuestión de derechos laborales y optimización de los servicios públicos que ofrecemos a la ciudadanía”, ha expresado Campillo.
El acuerdo definitivo, que se suscribirá formalmente el mes de septiembre entre la corporación y las secciones sindicales, se basa entre otras medidas, en el objetivo del incremento de la productividad y la flexibilidad en los tiempos de trabajo. Se podrán hacer 35 horas efectivas de trabajo y las otras 110 horas anuales hasta completar el horario mediante seis vías diferentes: un programa de acciones formativas como formadoras y formadores ocasionales internos, otro para tutorizar a nuevos trabajadores y trabajadoras, uno de voluntariado por el valenciano, otro más de grupos de mejora de procesos, procedimientos, trámites, actualización de catálogo de procedimientos o actividades y servicios municipales u otras metodologías, implantación de modelos de gestión de la calidad o la mejora continua y otro de implantación, seguimiento y ejecución del Plan de Gobierno, la obtención de evaluaciones del cumplimiento y del rendimiento positivas o la participación en acciones formativas del Plan de Formación continua.
Se incorporan medidas de especial protección a las mujeres embarazadas a partir de la semana 37 o, en caso de gestación múltiple, de la 35. Además, se establece la duplicación de las ayudas por jubilación anticipada, una nueva ayuda por hijo o hija del personal del Ajuntament por asistir a Escuelas Infantiles de Verano y también la inclusión de la interrupción voluntaria del embarazo entre los supuestos exceptuados de descuentos por baja por incapacidad temporal, así como medidas de protección para las mujeres empleadas víctimas de violencia de género.
Además, se creará un programa piloto para estudiar la implementación del teletrabajo en la administración pública y también se elaborará un repertorio de funciones y competencias de los empleos municipales para que el personal los conozca y sepa qué necesita para desarrollarlos.
Medidas de transparencia en la gestión: por lo que respecta a la selección, la movilidad y la consolidación, el Acuerdo del Cambio acaba con la opacidad en las prácticas selectivas con unas Bases Generales de Acceso a la Función Pública que dotan a todos los procesos de todas las garantías de publicidad, capacidad, mérito y transparencia. Además, se ordena y se racionaliza la movilidad voluntaria del personal municipal y se iniciarán los procesos de consolidación de empleo temporal.
En el marco de la negociación de este documento, se ha acordado también establecer las bases de los procesos de mejora de empleo dentro de la casa y establecer las bases de los procesos de consolidación para ir bajando la temporalidad en el trabajo del Ajuntament de València. “Las nefastas políticas del gobierno anterior han hecho que la temporalidad sea muy alta, con interinos que llevan en algunos casos más de 20 años en el ayuntamiento”, ha destacado Campillo.
Por otro lado, se prevé la implementación de la carrera profesional horizontal con la aprobación de un reglamento de la nueva estructura retributiva que facilite la implantación de la misma. Se plantea el reconocimiento de la carrera horizontal del personal funcionario por su buen trabajo, experiencia y cumplimiento de funciones que serán evaluadas y se implantan una serie de factores que permiten esa progresión horizontal de los trabajadores y las trabajadoras del consistorio. El Acuerdo del Cambio establece la importancia de la evaluación del trabajo realizado y del rendimiento para poder progresar en la carrera horizontal y se premiará económicamente al personal que se esfuerza por mejorar el servicio público. De hecho, los efectos de esa evaluación en el marco de la carrera profesional serán factores clave de la modernización municipal.
En lo que respecta a la formación, pasa a ser una herramienta estratégica para la gestión de las personas. Se incorpora la elaboración de un plan de carácter plurianual con seis ejes estratégicos de formación: habrá auditoría anual de las necesidades formativas, se incorporan agentes prescriptores de la formación, se crea la figura del formador interno ocasional, los formadors internos se podrán formar para mejorar sus capacidades y se elaborará un reglamento de formación para regular y aclarar aspectos relacionados con la formación municipal en el plazo máximo de un año.
El Ajuntament garantizará la utilización de las lenguas oficiales de las administraciones públicas valencianas al tiempo que favorecerá el conocimiento del valenciano por parte de su personal. También favorecerá el uso de la lengua de signos para atender a la ciudadanía que así lo requiera. También habrá un Código de Buena Administración con que se desarrollará una política integrada de compromiso con el medio ambiente laboral y la sostenibilidad en el lugar de trabajo, con medidas contra el acoso sexual, laboral, de género y psicológico y favoreciendo la conciliación de la vida laboral y familiar.
Además, el Ajuntament asume como propios los principios de no discriminación e igualdad de trato con independencia del sexo, el estado civil, la edad, el origen racial o étnico, la condición social, la religión o las convicciones, las ideas políticas, la orientación sexual, la identidad de género, discapacidades, afiliación o no a sindicatos o por lengua.
Finalmente, se elaborará un Plan de Ordenación de Recursos Humanos como instrumento para conseguir la eficacia en la prestación de servicios y la eficiencia en la utilización de los recursos económicos mediante la dimensión adecuada de los efectivos, su distribución mejor, la formación, la promoción profesional y su movilidad.
Para finalizar, el concejal aseguró que “este es un convenio revolucionario que cambia de arriba abajo las condiciones laborales y la política de personal de nuestro ayuntamiento. Además, quiero agradecer la buena disposición de todas las secciones sindicales de la Mesa General de Negociación y a todo el personal de la casa durante todo este tiempo. Comenzamos a negociar desde el inicio del mandato y ha costado porque es un acuerdo que cambia por completo el modelo anterior y los grandes cambios requieren tiempo. Estoy convencido de que seguirá esta buena predisposición a la hora de desarrollar todas las potencialidades del nuevo acuerdo y esta corporación siempre estará al lado de sus empleados y empleadas”.