El edificio número 7 de la plaza de Manises, situado entre la sede de la Diputación de Valencia y el Palau de la Generalitat, albergará un hotel de lujo, tras la modificación de usos del mencionado edificio que, tal como ha acordado hoy el Equipo de Gobierno, se va a someter a información pública.
Este inmueble, una casa palaciega de propiedad privada, había sido utilizado para un uso administrativo (ya que los propietarios lo tenían alquilado a la Diputación). Si bien, el edificio ha dejado de estar arrendado y sus dueños han solicitado el cambio de uso administrativo a uso terciario-hotelero, que está dentro de los usos permitidos por el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) para esta parcela.
El Concejal Delegado de Urbanismo, Alfonso Novo, ha destacado que “el cambio de uso ha recibido el visto bueno de la Dirección General de Patrimonio”, y ha asegurado que la modificación “no supone un desequilibrio en las dotaciones públicas de la zona”.
El edificio cuenta con un nivel de protección 2 y su rehabilitación ha de cumplir una serie de condiciones (como mantener la fachada y los elementos estructurales), Respecto a la ubicación de un futuro hotel en este edificio, Alfonso Novo ha manifestado que “será un hotel que se situará en una zona importante y sensible, por eso la idea es que, respetando el edificio y el entorno, así como el mencionado nivel de protección, se pueda llegar a desarrollar una actividad, que garantice la pervivencia de un inmueble emblemático en el centro de la ciudad”.
En el debate plenario, los grupos políticos de la Oposición han manifestado su disconformidad con este cambio de usos del inmueble. Concretamente, el socialista Joan Calabuig, ha explicado la “abstención” de su grupo, “que no es un voto en contra porque reconocen que el edificio es de propiedad privada, pero no puede ser favorable porque consideran que el cambio no genera compensaciones para la ciudad”.
En nombre del Grupo Municipal Esquerra Unida, que ha votado en contra, el Portavoz Amadeu Sanchis, ha defendido “que un cambio del planeamiento tiene que responder al interés general, y que esta modificación genera un desequilibrio dotacional y sólo beneficiará a sus propietarios”; mientras que el Portavoz del Grupo Compromís, Joan Ribó, ha rechazado la propuesta por considerarla “un trato de favor con una familia concreta”.
Alfonso Novo ha reiterado que el edificio, que data de mediados del siglo XIX, ha sido objeto de un expediente “que sólo quiere recuperar y poner en valor un inmueble importante, en el que, por otra parte, no están interesadas las Administraciones, por lo que no se puede hablar de una pérdida de dotaciones”.
Finalizado este debate, la Alcaldesa ha intervenido para solicitar a los Concejales que se moderen en sus intervenciones “porque se están haciendo muy frecuentes los comportamientos que rozan lo que permite la ley”.
VLC Ciudad / Redacción