En España, los apellidos se pueden clasificar en cuatro tipos principales, cada uno con un origen y significado distintos. Estos son:
- Apellidos Patronímicos: Son los más extendidos en España y se originan de un nombre propio. Estos apellidos se derivan del nombre del padre y suelen terminar en -ez, -oz, -iz, -az. Por ejemplo, “Fernández” significa “hijo de Fernando”, y “Rodríguez” significa “hijo de Rodrigo”. Este tipo de apellido es único en los países de lengua románica y se extendió en Navarra desde los siglos VIII y IX.
- Apellidos Toponímicos: Proceden del nombre de un lugar, indicando de dónde es la persona o su familia. A menudo llevan la preposición “de”, “del”, “de la”, o simplemente son gentilicios. Ejemplos incluyen “Navarro” (de Navarra), “Salazar” (de un lugar llamado Salazar), o “Del Río” (del río).
Algunos apellidos que son patronímicos son los siguientes: Alesanco, Ojeda, Ocaña, Catalán, Corral, Fresneda, Dávala (De Ávila), Navarro, Salazar, Soto, Torrente, Villanueva, Yuso… También los apellidos que encontramos con el “del”, que se usan en España frecuentemente, entre ellos, los siguientes: Del Río. Del Valle. Del Pino. Del Campo. Del Castillo. Del Olmo. Del Moral. Del Amo. Del Barrio. Del Rey. Del Val. Del Cerro. Del Hoyo. Del Toro. Del Rosario. Del Alamo. Del Arco. Del Prado. Del Águila. Del Saz. Del Fresno. Del Barco. Del Sol. Del Blanco. Del Cura. Del Real. Del Hierro. Del Puerto. Del Amor. Del Caño. Del Canto. Del Monte. Del Bosque. Del Palacio. Del Peso. Del Rincón. Del Corral. Del Mazo. Del Rosal. Del Cid. Del Villar. Del Burgo. Del Carmen. Del Estal. Del Molino. Del Riego. Del Ojo. Del Riego. Del Peral. Del Viso. Del Viejo. Del Casar. Del Teso. Del Baño. Del Coso. Del Cueto. Del Árbol. Del Brío. Del Caz. Del Paso. Del Corro. Del Dedo. Del Solar. Del Portillo. Del Brío. Del Caz. Del Vas. Del Dedo. Del Portillo. Del Jesús. Del Salto. Del Tio. Del Hogal. Del Egido. Del Ramo. Del Ser. Del Pueblo. Del Agua. Del Diego. Del Cacho. Del Buey. Del Ramo. Del Horno. Del Cuadro. Del Caso. Del Llano. Del Pico. Del Ama. Del Oso. Del Fueyo. Del Nido. Del Pico. Del Dago. Del Nuevo. Del Cabo. Del Oro. Del Soto. Del Junco. Del Cuvillo. Del Santo. Del Reguero. Del Cano. Del Vals. Del Vado. Del Carpio. Del Sastre. Del Espino. Del Pueyo. Del Coz. Del Cojo. Del Ruste. Del Pazo. Del Marco. Del Piñal. Del Fraile. Del Dujo. Del Pliego. Del Bosch. Del Castillo-Olivares. Del Pozuelo. Del Collado. Del Ordi. Del Olivo. Del Salado. Del Trigo. Del Bot. Del Boz. Del Prestamo. Del Torno. Del Bado. Del Ángel. Del Pilar. Del Pont. Del Reino. Del Tejo. Del Bien. Del Guayo. Del Socorro. Del Alcazar. Del Gallego. Del Gallo. Del Roj. Del Bao. Del Huerto. Del Pecho. Del Ganso. Del Saac. Del Camino. Del Arroyo. Del Arco-Calderón. Del Valls. Del Verbo. Del Bustio. Del Frago. Del Orden. Del Páramo. Del Pie. Del Puente.
- Apellidos Derivados de Nombres Comunes o de Oficios o Profesiones: Estos apellidos provienen de la profesión o actividad que ejercía la persona o su familia. Por ejemplo, “Carpintero” (persona que trabaja la madera), “Guerrero” (combatiente), o “Zapatero” (fabricante o reparador de zapatos).
- Apellidos Descriptivos o de Apodos: Estos apellidos se originan en una descripción física o algún apodo distintivo de la persona o familia. Ejemplos son “Calvo” (persona sin cabello), “Lozano” (vistoso, alegre), o “Pequeño” (de estatura baja).
Además, existen los Apellidos Castellanizados, que son aquellos que, proveniendo de otros idiomas, fueron adaptados al castellano. Un ejemplo sería la transformación de “Branco” a “Blanco”.
Cada apellido refleja una parte de la historia y la cultura de España, revelando no solo el origen geográfico o familiar de una persona, sino también aspectos de su herencia y de la sociedad en la que vivían sus ancestros.