Es verdad que… Castellano (baix en valencià)
Es verdad que –Nos están acorralando- nuestro camino cada día se pone más duro. Las medidas impositivas de nuestro gobierno, nos asfixian nuestras escasas economías. Ahora llegará el endurecimiento en multas por determinadas formas de protesta.
Es verdad que –Nos quitan los puestos de trabajo- a diario, con las leyes que este gobierno ha asentado, con EREs completamente falseados y con despidos baratos.
Es verdad que –Nos quitan los derechos conquistados tras largos años de lucha los derechos civiles están sufriendo un retraso asimilable a peligroso. El control masivo e indiscriminado de los ciudadanos y ciudadanas en la vía pública, sobrepasa los límites tolerables de la normalidad, límites establecidos por la presunción de la posible comisión de actos delictivos –actuaciones preventivas-. Acaso merezca por parte del gobierno de turno que manifestarse públicamente, en paz y en orden, merece la criminalización para evitar que las calles se conviertan en lo que son, vía pública y de todos los ciudadanos y ciudadanas.
Es verdad que –Nos cerraron la puerta a la justicia- maquillaron dicha medida recaudatoria en que por cualquier cosa acudimos a los tribunales de justicia. La justicia gratuita ha muerto con este gobierno. Cuando los ciudadanos y ciudadanas acuden a la justicia se entiende que lo hacen porque se consideran lesionados en lo concerniente a sus derechos, siendo la institución adecuada para plantear y resolver tales conflictos. Nadie acude la justicia sin necesidad de ello. Es verdad que –No podremos demandar una factura abusiva del agua, ni de la luz, ni del teléfono. No tendremos dinero para hacerlo tras el TASAZO- cada día que pasa nuestra moneda vale mucho menos, nos llega para lo justo y los salarios están a la rebaja permanente a favor del empresario y de la Administración con sus recortes sociales.
Es verdad que –Solo podremos acudir a hospitales de “caridad”. Si no tienes medios, tampoco tienes Sanidad- la sanidad la están privatizando para que unos pocos hagan un negocio lucrativo a costa de los enfermos necesitados de atención sanitaria y hospitalaria, por no decir de farmacéutica. Cuando los enfermos crónicos y/o con enfermedades costosas para la sanidad sean tratados como mercancía de cambio para hacer negocio, bien seguro que dichos pacientes serán tratados como clientes desechables del sistema privado de salud, y serán derivados a donde siempre fueron atendidos, a la sanidad pública, a la poca sanidad pública que se mantenga como tal.
Es verdad que –La educación pública nos mantendrá en la mayor incultura para así manejarnos mejor y que entendamos menos- la educación va de mal en peor, que no existen unas líneas maestras que predominen sobre los criterios de adoctrinamiento político de gobernantes de turno. La educación también pertenece a los ciudadanos, no debemos permitir que nuestros activos educativos también sean convertibles por intereses negociables. No se puede hacer negocio del futuro. No se puede hacer negocio con la educación para nuestros niños y jóvenes.
Es verdad que –Los bancos seguirán con sus abusos (recuerda, están blindados y no tienes medios para defenderte)- los bancos, con sus lobbys buscarán la forma de que el gobernante entienda la ley bajo criterios usureros.
Es verdad que -Volvemos a la España de hace más de 30 años- volvemos a donde empezábamos a levantar cabeza, solo que en la actualidad será para tener que esconder la cabeza, llevándonos a los tiempos añejos de fractura social, y necesidades primarias. Hay quienes no pasan página a la historia y se mantienen anclados al pasado, tanto de derechas como de izquierdas, pasando por el centro. A nuestros representantes no les duelen prendas para echarnos las culpas de los males sociales, cuando la verdad es que ellos son el verdadero mal social, no han sabido o no han querido desarrollar una democracia participativa donde todos estemos realmente representados.
Es verdad que -El gobierno y la oposición no han perdido poder, ni dinero, ni pensiones, ni viajes en primera clase, ni derechos- los usos y abusos del poder se mantienen intactos pese a la mal llamada crisis. Esto no es una crisis, esto es una estafa.
Es verdad que -Son corruptos. No les importamos- pese a destaparse a diario casos de corruptelas, sigan con su mismo desparpajo. No tienen vergüenza. Es verdad, solo se importan ellos y sus miserias. Solo tienen en cuenta sus propios intereses usureros y partidistas.
Es verdad que -Cuando pierdan las elecciones, se llevarán los bolsillos llenos y los siguientes sabrán que pueden hacer lo mismo que los anteriores, lo que quieran con un pueblo sumiso, cansado y empobrecido- cuando consigamos echarles, irremediablemente tendremos que verles marchar con los bolsillos llenos y con pensiones no merecidas. Si sus pensiones se ajustarán a los logros sociales obtenidos, tendrían algunos que devolver sus salarios. Valentía tendrían que tener para establecer sus salarios y pensiones de acorde con un método de productividad en logros. Pero no tienen esa valentía. La cobardía les puede también.
Es verdad que hace falta nos -UNÁMONOS en TODO EL TERRITORIO NACIONAL. Salgamos a la calle pacíficamente pero con determinación- unidos al unísono, con una sola meta, en una sola voz, la voz del pueblo y de sus ciudadanos y ciudadanas.
Es verdad que debemos aunar en todas las ciudades y pueblos, voluntades no adscritas al dictado de ningún partido ni sindicato, aunque militen en partidos y sindicatos. Voluntades que hartos del sistema actual, no quieren saber nada de dictados de lo que da en llamarse “aparato” de partidos y sindicatos. Sí, si hay que aunar voluntades y opiniones de voces discrepantes de los actuales “aparato” de los partidos y sindicatos tradicionales. Lo contrario sería ir contra natura del nacimiento de un nuevo sistema político, de un nuevo sistema de gobernar, de un nuevo sistema que represente a cada ciudadano su propio voto.
Es verdad que hay voces discrepantes de sindicatos obreros –CCOO, UGT, etc…-; de sindicatos profesionales –policiales, militares y judiciales-; de partidos que en lugar de contaminar a los movimientos sociales, para cobijar y recoger el voto en unas elecciones amparadas en una mala ley electoral, puedan seguir manteniéndose vivos a costa de una campaña falsa y mentirosa. Ya basta de tratar de manipular al pueblo. Ya basta de manipular a los ciudadanos y ciudadanas.
Solo hay un camino, el camino de los ciudadanos y ciudadanas como tales, una agrupación de electores libres de ataduras castenses.
El tiempo de los ciudadanos y ciudadanas está llegando, mientras que el tiempo de los partidos nacionalistas y tradicionalistas, están pasando. Renovarse o desaparecer. Ya saben lo que les toca. La elección es de quien es, del pueblo que ya está determinando su propio camino.
Es verdad que -Esto es un llamamiento para los ciudadanos y ciudadanas- el pueblo en general debe y necesita ser llamado a consulta, de forma que su voto sirva para el control político, para que sean respetadas sus voluntades a la hora de haber depositado el voto. Hay que votar proyectos de Estado. Hay que votar proyectos de ciudadanía.
Es verdad que solo nos queda una salida, los que nos gobiernan se han hecho una ley electoral a su medida, pero al final somos nosotros con nuestro voto quienes les dejamos que nos manejen, está todo mal pero tenemos la ocasión de establecer la democracia participativa, puesto que ellos alardean de que somos un país democrático, este es el talón de Aquiles que nos queda para poder cambiar las cosas, esta vez no nos dejemos engañar con el dilema de que son de izquierdas o derechas, pidamos a los nuevos partidos una “agrupación de electores”, que presente un proyecto de País comprometidos con los ciudadanos y ciudadanas, para culminar un cambio político y social que permita una democracia participativa de verdad.
José Ant. Atienza.-
És veritat que…( valencià )
És veritat que -Nos estan acorralant- el nostre camí cada dia es posa més dur. Les mesures impositives del nostre govern, ens asfixien les nostres escasses economies. Ara arribarà l’enduriment en multes per determinades formes de protesta.
És veritat que -Nos lleven els llocs de treball- diàriament, amb les lleis que este govern ha assentat, amb EREs completament falsejats i amb acomiadaments barats.
És veritat que -Nos lleven els drets conquistats després de llargs anys de lluita els drets civils estan patint un retard assimilable a perillós. El control massiu i indiscriminat dels ciutadans i ciutadanes en la via pública, sobrepassa els límits tolerables de la normalitat, límits establits per la presumpció de la possible comissió d’actes delictius -actuacions preventives-. Potser mereixerà per part del govern de torn que manifestar-se públicament, en pau i en orde, mereix la criminalización per a evitar que els carrers es convertisquen en el que són, via pública i de tots els ciutadans i ciutadanes.
És veritat que -Nos van tancar la porta a la justícia- van maquillar la dita mesura recaptatòria en què per qualsevol cosa acudim als tribunals de justícia. La justícia gratuïta ha mort amb este govern. Quan els ciutadans i ciutadanes acudixen a la justícia s’entén que ho fan perquè es consideren lesionats pel que fa als seus drets, sent la institució adequada per a plantejar i resoldre tals conflictes. Ningú acudix la justícia sense necessitat d’això. És veritat que -No podrem demandar una factura abusiva de l’aigua, ni de la llum, ni del telèfon. No tindrem diners per a fer-ho després del TASAZO- cada dia que passa la nostra moneda val molt menys, ens arriba per al més just i els salaris estan a la rebaixa permanent a favor de l’empresari i de l’Administració amb els seus retalls socials.
És veritat que -només podrem acudir a hospitals de “caridad”. Si no tens mitjans, tampoc tens Sanitat- la sanitat l’estan privatitzant perquè uns pocs facen un negoci lucratiu a costa dels malalts necessitats d’atenció sanitària i hospitalària, per no dir de farmacèutica. Quan els malalts crònics y/o amb malalties costoses per a la sanitat siguen tractats com a mercaderia de canvi per a fer negoci, ben segurs que dites pacients seran tractats com a clients d’usar i tirar del sistema privat de salut, i seran derivats a on sempre van ser atesos, a la sanitat pública, a la poca sanitat pública que es mantinga com a tal.
És veritat que L’educació pública ens mantindrà en la major incultura per a així manejar-nos millor i que entenguem menys- l’educació va de mal en pitjor, que no hi ha unes línies mestres que predominen sobre els criteris d’adoctrinament polític de governants de torn. L’educació també pertany als ciutadans, no hem de permetre que els nostres actius educatius també siguen convertibles per interessos negociables. No es pot fer negoci del futur. No es pot fer negoci amb l’educació per als nostres xiquets i jóvens.
És veritat que -els bancs seguiran amb els seus abusos (recorda, estan blindats i no tens mitjans per a defendre’t) – els bancs, amb els seus lobbys buscaran la forma que el governant entenga la llei baix criteris usurers.
És veritat que -tornem a l’Espanya de fa més de 30 anys- tornem a on començàvem a alçar cap, només que en l’actualitat serà per a haver d’amagar el cap, emportant-nos als temps rancis de fractura social, i necessitats primàries. Hi ha els que no passen pàgina a la història i es mantenen ancorats al passat, tant de dretes com d’esquerres, passant pel centre. Als nostres representants no els sap gens greu per a tirar-nos les culpes dels mals socials, quan la veritat és que ells són el verdader malament social, no han sabut o no han volgut desenrotllar una democràcia participativa on tots estiguem realment representats.
És veritat que -El govern i l’oposició no han perdut poder, ni diners, ni pensions, ni viatges en primera classe, ni drets- els usos i abusos del poder es mantenen intactes a pesar de la mal anomenada crisi. Açò no és una crisi, açò és una estafa.
És veritat que -són corruptes. No els importem- a pesar de destapar-se diàriament casos de corrupteles, seguisquen amb el seu mateixa desimboltura. No tenen vergonya. És veritat, només s’importen ells i les seues misèries. Només tenen en compte els seus propis interessos usurers i partidistes.
És veritat que -quan perden les eleccions, es portaran les butxaques plenes i els següents sabran que poden fer el mateix que els anteriors, la qual cosa vullguen amb un poble submís, cansat i empobrit- quan aconseguim tirar-los, irremeiablement haurem de veure’ls anar amb les butxaques plenes i amb pensions no merescudes. Si les seues pensions s’ajustaran als èxits socials obtinguts, tindrien alguns que tornar els seus salaris. Valentia haurien de tindre per a establir els seus salaris i pensions de d’acord amb un mètode de productivitat en èxits. Però no tenen eixa valentia. La covardia els pot també.
És veritat que fa falta nos -UNÁMONOS en TOT EL TERRITORI NACIONAL. Isquem al carrer pacíficament però amb determinació- units a l’uníson, amb una sola meta, en una sola veu, la veu del poble i dels seus ciutadans i ciutadanes.
És veritat que hem d’unir en totes les ciutats i pobles, voluntats no adscrites al dictat de cap partit ni sindicat, encara que militen en partits i sindicats. Voluntats que farts del sistema actual, no volen saber res de dictats del que dóna a cridar-se “aparato” de partits i sindicats. Sí, si cal unir voluntats i opinions de veus discrepants dels actuals “aparato” dels partits i sindicats tradicionals. El contrari seria anar contra natura del naixement d’un nou sistema polític, d’un nou sistema de governar, d’un nou sistema que represente a cada ciutadà el seu propi vot.
És veritat que hi ha veus discrepants de sindicats obrers -CCOO, UGT, etc…-; de sindicats professionals -policials, militars i judicials-; de partits que en compte de contaminar als moviments socials, per a albergar i arreplegar el vot en unes eleccions emparades en una mala llei electoral, puguen seguir mantenint-se vius a costa d’una campanya falsa i mentidera. Ja basta de tractar de manipular al poble. Ja basta de manipular els ciutadans i ciutadanes.
Només hi ha un camí, el camí dels ciutadans i ciutadanes com a tals, una agrupació d’electors lliures de lligams castenses.
El temps dels ciutadans i ciutadanes està arribant, mentres que el temps dels partits nacionalistes i tradicionalistes, estan passant. Renovar-se o desaparéixer. Ja saben el que la toca. L’elecció és de qui és, del poble que ja està determinant el seu propi camí.
És veritat que -açò és una crida per als ciutadans i ciutadanes- el poble en general deu i necessita ser cridat a consulta, de manera que el seu vot servisca per al control polític, perquè siguen respectades les seues voluntats a l’hora d’haver depositat el vot. Cal votar projectes d’Estat. Cal votar projectes de ciutadania.
És veritat que només ens queda una eixida, els que ens governeu s’han fet una llei electoral a la seua mesura, però al final som nosaltres amb el nostre vot els que els deixem que ens manegen, està tot mal però tenim l’ocasió d’establir la democràcia participativa, ja que ells gallegen de que som un país democràtic, este és el taló d’Aquil·les que ens queda per a poder canviar les coses, esta vegada no ens deixem enganyar amb el dilema que són d’esquerres o dretes, demanem als nous partits una “agrupación d’electores”, que presente un projecte de País compromesos amb els ciutadans i ciutadanes, per a culminar un canvi polític i social que permeta una democràcia participativa de veritat.
José Ant. Atienza.-