Ucrania, que comparte fronteras con Rusia y la Unión Europea (UE), ha dudado durante mucho tiempo entre estrechar sus vínculos con el Este o el Oeste. En 2013 estuvo a punto de firmar un acuerdo de asociación con la UE.
Pero sus dirigentes dieron marcha atrás, lo que provocó meses de protestas, la caída del Gobierno, la intervención rusa en Crimea y el conflicto en la parte oriental del país. Ahora, tras la ratificación simultánea del acuerdo entre la UE y Ucrania se abre una nueva fase.
Ucrania se enfrenta a graves problemas económicos y una profunda división de su sociedad. Aunque muchos ucranianos estén a favor de estrechar los vínculos de su país con la Unión Europea, la población de habla rusa en el Este del país desconfía del nuevo Gobierno de Kiev.
Crimea ha reclamado la independencia y sustituido a las autoridades locales con partidarios de Rusia. Y Moscú ha sido acusada de enviar tropas para garantizar sus posiciones estratégicas clave.
Tras la histórica ratificación simultánea del Acuerdo de Asociación en Kiev y en Estrasburgo, el Presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, aseguró que la Eurocámara “siempre ha defendido y defenderá la integridad territorial y la soberanía de Ucrania”.
VLCNoticias|Redacción