Un miembro del comité de empresa ha señalado que los representantes de los trabajadores, tanto del metro de Valencia como del TRAM de Alicante, han registrado ya la convocatoria de paros y huelgas. Con anterioridad, como es preceptivos, acudirán al tribunal de arbitraje laboral.
Las medidas de presión obedecen al anuncio de la dirección de FGV de acometer una plan de reestructuración del que forma parte un Expediente de Regulación de Empleo sobre el que aún no se han concretado más datos.
Los trabajadores aseguran que los paros y huelgas pretenden “obligar a la dirección a que se siente a negociar con los trabajadores y que explique las medidas concretas y el alcance del ERE”.
FGV, que gestiona los servicios de Metrovalencia y TRAM de Alicante, está afectada por el proceso de reorganización del sector público que está llevando a cabo la Generalitat.
Con estos cambios, FGV ha quedado integrada como la única entidad del área de Movilidad y Transporte, según el nuevo mapa de entidades del Plan Estratégico de Racionalización y Reestructuración del Sector Público Empresarial y Fundacional de la Comunitat Valenciana.