El ciclista irlandés, vencedor en la séptima etapa, se impone en Imola. Simon Yates conserva la magila rosa.
Bennett, que ya se impuso en la séptima etapa en Praia di Mare, fue el más fuerte en la recta de meta del Autódromo Enzo y Dino Ferrari de Ímola, y sin necesidad de esprint, con una simple aceleración final levantó los brazos con un tiempo de 4h.49.34, por delante del holandés Danny Van Poppel (LottoNL-Jumbo).
Simon Yates mantuvo un día más la maglia rosa de líder en una jornada de transición marcada por la intensa lluvia.
No hubo esprint al uso.Bennett adelantó como un rayo al esloveno Mohoric y al colombiano Betancur, que marchaban escapados, y cruzó la línea muy por delante del holandés Danny Van Poppel (Lotto-Jumbo) y del italiano Niccolo Bonifazio (Bahrain).
“Ha sido un esprint, sí, pero no el habitual, Creo que les sorprendí por la forma de adelantarlos. Estoy muy contento por esta segunda victoria en el Giro”, dijo el irlandés nacido en Wervik, (Bélgica).
Los favoritos borraron otra fecha del calendario en una jornada dura por la lluvia y por los nervios de los últimos kilómetros, cuando se sucedieron los ataques por la etapa. Yates sigue al frente de la general con el holandés Tom Dumoulin (Sunweb) a 47 segundos y el francés Thibaut Pinot (Groupama) a 1.04. El español Pello Bilbao (Astana) es octavo a 2.54 minutos.
Etapa de transición
Etapa de transición, pero a un ritmo serio, de 44 kms/hora. Laescapada del día la compusieron Senni, Maestri, Dzhupa, Frapporti y Mosca. Nada de peligro para los jefes, por lo que hubieron de trabajar los equipos de los esprinters, pensando en una oportunidad de oro en un circuito de velocidad, cita ineludible para los “guepardos”.
Bora, Quick-Step y Education-First apretaron en la persecución pensando en Bennett, Viviani y Modolo, tanto que el grupo llegó a romperse poniendo en dificultades al ecuatoriano Carapaz, quien quedó cortado, aunque luego enlazó en el grupo.
A 25 de meta se disolvió la escapaday empezó otra etapa diferente con Viviani rezagado. Bajo el diluvio atacó el belga Wellens, en un terreno y condiciones idóneas para el clasicómano belga del Lotto Soudal. Restaban 10 kilómetros para meta y el ascenso a Tre Monti, con la cima a 7 de la conclusión.
Wellens cedió y lo intentó el colombiano Henao cuesta arriba, pero el campeón nacional en ruta no tuvo licencia para ganar. Así que en el descenso se la volvió a jugar el esloveno Mohoric, otro corredor que vuela con la lluvia y en situaciones peligrosas.
El ciclista del Bahrein abrió un pequeño hueco camino del circuito. A su rueda se pegó el colombiano del Movistar Carlos Betancur. Ambos entraron al autódromo con apenas 3 segundos a 1.000 metros de meta.
El pelotón llegaba en fila india, en busca del dúo de cabeza. Entre todos apareció como un bolidoSam Bennett, pasó a Mohoric y Betancur y se lanzó hacia el doblete. Lo logró con suficiencia, sin oposición alguna, en un escenario mítico por sus glorias y algunas tristezas. En el circuito de Imola, año 1994, perdió la vida el triple campeón del mundo brasileño de Fórmula 1 Ayrton Senna.
Este viernes se disputa la decimotercera etapa entre Ferrara y Nervesa della Bataglia, con un recorrido de 180 kilómetros.