Un estudio que se acaba de publicar en la revista Scientific Reports ha demostrado la existencia de contaminación prehistórica por metales pesados en el ambiente de cuevas arqueológicas peninsulares, y especula sobre las probables implicaciones negativas sobre la salud.
En concreto este estudio ha demostrado la existencia de contaminación prehistórica por metales pesados en el ambiente de cuevas arqueológicas situadas de la península ibérica, y especula sobre las probables implicaciones negativas sobre la salud de los habitantes de dichas cueva.
Para llegar a estas conclusiones, un equipo formado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de diversas universidades españolas y extranjeras ha analizado el sedimento procedente de cuatro importantes yacimientos de la prehistoria peninsular: Gran Dolina en Atapuerca, Gorham´s y Vanguard en Gibraltar y El Pirulejo en Priego de Córdoba.
Este estudio ha demostrado la existencia de contaminación prehistórica por metales pesados en el ambiente de cuevas arqueológicas situadas de la península ibérica
Los resultados de este trabajo arrojan niveles de contaminación que se ajustan a los estándares para describir actualmente un “suelo contaminado” por metales pesados.
En Gran Dolina se han hallado niveles de paleocontaminación asociados a depósitos de guano, sustrato resultado de los excrementos de murciélagos, datados en unos 450.000 años de antigüedad.
En los yacimientos neandertales gibraltareños de Gorham´s y Vanguard, así como en los yacimientos de humanos modernos de El Pirulejo, los estratos contaminados se asocian con actividades de los ocupantes de la cueva.
Además, en Gorham´s y Vanguard, la paleocontaminación evidencia el uso de hogares neandertales, ya que se localizan en niveles de cultura musteriense (Paleolítico Medio), mientras que en El Pirulejo, con una cronología más moderna (Paleolítico Superior), se relacionan con la manipulación de la galena, un mineral rico en plomo (Pb), ya fuera para rituales de enterramientos como para actividades metalúrgicas.
Se puede igualmente especular si este hecho tuvo algo que ver con la extinción definitiva de los neandertales en el sur de la Península Ibérica. Futuros estudios irán enfocados específicamente a este problema.
Referencia bibliográfica:
Guadalupe Monge et al. “Earliest evidence of pollution by heavy metals in archaeological sites”Scientific Reports5: 14252 (2015) doi:10.1038/srep14252