Cuando en 1631 murió la esposa favorita del emperador musulmán Shah Jahan, él lloró su pérdida levantando en su honor el Taj Mahal, uno de los monumentos más bellos del mundo. Cuatro siglos después, otro musulmán indio construye a su esposa fallecida una réplica del famoso mausoleo.
Faizul Hasan Quadri, de 80 años, ya hace cuatro años que levanta en honor a su esposa fallecida un panteón similar al famoso Taj Mahal, pero con rasgos menos lujosos, gastando en la construcción todo el dinero que gana como funcionario de correos.
Faizul y Tajammuli estuvieron casados 67 años, pero no tuvieron hijos. Un día Tajammuli le preguntó a su esposo quién se acordaría de ellos cuando murieran. En una entrevista para la agencia EFE, publicada por el portal La Tercera, Faizul contó: “Yo le prometí que si se moría cuando yo todavía estuviera vivo construiría una tumba que la gente no iba a olvidar en años”.
Faizul lavanta una sencilla réplica del Taj Mahal por su cuenta sin conocimientos matemáticos ni de ingeniería y con la ayuda de un solo trabajador. Recientemente se le terminó su presupuesto de 1.100.000 rupias (16.500 de dólares) que Faizul ahorró durante su vida. La historia de Faizul Hasan Quadri conmovió a todo el país y la semana pasada las autoridades del estado indio de Uttar Pradesh, donde vive él y donde se encuentra el Taj Mahal original (en la ciudad de Agra), decidieron ayudar a Faizul proporcionándole los recursos necesarios.
Faizul calcula que necesita cinco años y unos 7.500 dólares más para terminar su tarea, colocar los mármoles y el jardín. Pero no tiene miedo de morirse sin concluir las obras: “En la vida hay muchos trabajos incompletos, yo me fío de él”, dice Faizul señalando al cielo.