Dos ex presidentes del Valencia CF, que está actualmente inmerso en el proceso de venta a inversores externos, han protagonizado hoy la nota si no cómica, sí un tanto estrambótica al conocerse esta mañana que el primero de ellos -cronológicamente hablando-, Juan Soler, había pasado la noche en un calabozo al ser detenido presuntamente por intento de secuestro del segundo, Vicente Soriano. Hasta aquí, la noticia no deja de aportar cierta dosis de hilaridad a una historia de encuentros y desencuentros mediáticos y hasta judiciales entre dos personajes de la vía pública valenciana de los que suelen dar para muchos titulares pero poco más.
Pero esto no es más que el final de una historia que viene de mucho tiempo atrás, concretamente del momento en que Vicente Soriano -que entonces se creía respaldado por la empresa Valport– llegó a un acuerdo al entonces máximo accionista del Valencia CF, Juan Soler, para adquirir la totalidad de las acciones del Valencia CF que estaban en posesión de éste y de su padre, Juan Bautista Soler, para así acceder a la presidencia del club y facilitar la llegada de un inversor argentino, Víctor Vicente Bravo, que acabó en agua de borrajas al no ofrecer ya entonces a Bankia garantías de suficiente solvencia.
Con el tiempo, Juan Soler entró en una batalla legal contra Vicente Soriano y Dalport por incumplimiento de contrato en dicha compra de sus acciones, batalla que no hace tanto acabó con el Tribunal Supremo confirmando la sentencia de la Audiencia Provincial de Valencia que condenaba a pagar a Soriano y a Dalport veinte millones más seis millones de intereses.
Eso ocurría hace apenas dos años y hasta la fecha no se habían producido -o al menos no habían trascendido- más episodios de enfrentamiento entre los dos ex presidentes valencianistas… hasta que hace unas semanas, la Policía Nacional advirtió a Soriano que su vida corría serio peligro, razón por la que le aconsejaba que no saliera de su domicilio y que, de necesitar hacerlo, lo hiciera escoltado por agentes del cuerpo armado.
Finalmente, ayer se procedía, según ha informado en primicia esta mañana la edición digital de Las Provincias, a la culminación de las investigaciones que concluían con la detención de Juan Soler, que permaneció toda esta noche pasada en dependencias policiales, tras lo que el juez ha dictado para él la libertad provisional con obligación de comparecer cada 15 días ante el juzgado, la prohibición expresa de abandonar el país -de hecho le ha sido retirado el pasaporte- y una orden de alejamiento de 15 metros respecto a Vicente Soriano.
El juez no ha podido dictar orden de encarcelamiento al no haberla pedido la fiscalía -que en principio no ve indicios suficientes para ello-, razón por la cual este mediodía Juan Soler salía de los juzgados para irse a casa, momento en el que se ha limitado, ante la presencia de los medios, a negar los hechos. La causa sigue bajo secreto de sumario, por lo que se desconocen los pormenores tanto de las circunstancias e indicios que han llevado a la detención de Soler. Junto al ex mandatario ‘che’ han detenido a una persona de quien no ha trascendido el nombre ni la vinculación con él, si bien se ha descartado que sea un ‘sicario’.
En pleno proceso de selección de inversores para la venta del Valencia CF, y tras la retirada de la denominada ‘oferta árabe’ de dicho proceso supuestamente por las muestras de desprecio de Amadeo Salvo y Alfonso Rus, este estrambótico suceso aporta una nueva dosis de surrealismo a la ya de por sí atípica situación del club de Mestalla. Seguiremos informando.
VLC Noticias | Javier Furió