La Audiencia Provincial de Alicante juzga a siete personas por un delito contra la salud pública. El fiscal pide penas que oscilan entre los 5 y los 8 años de cárcel. Y a un hombre acusado de apuñalar a su mujer después de que ésta le llevara el desayuno a la habitación. Lo hizo con el cuchillo que la noche anterior el acusado había dejado sobre la mesilla de noche, hecho éste que no extrañó a su mujer porque pensó que el arma era para abrir las cajas de medicamentos que tomaba. Por la mañana, la víctima le llevó el desayuno y salió de la habitación. El acusado se levantó de la cama, cogió el arma y alcanzó a la víctima a la que apuñaló reiteradamente. Después, se volvió a acostar. La agredida pidió ayuda a gritos desde un balcón. Los hechos ocurrieron en abril del 2015. El acusado se estaba medicando contra la depresión. El fiscal pide doce años de cárcel por un delito de asesinato en grado de tentativa.
Además Juzgan a un hombre y una mujer, de nacionalidad rumana, acusados de engañar a compatriotas a las que convencían para que vinieran a España con la promesa de un trabajo legal cuando en realidad iban a ser obligadas a prostituirse. Los acusados actuaban en connivencia con un español, también inculpado, que regentaban un club de alterne en Cox, donde eran explotadas las mujeres. Uno de los acusados, además, se dedicaba a favorecer la inmigración clandestina de compatriotas. Los hechos ocurrieron en 2004. En el registro de las viviendas se halló gran cantidad de documentos falsificados. Para la mujer y el responsable del club el fiscal pide 6 años por detención ilegal y prostitución. Para el tercer acusado solicita 12 años porque le acusa, además, de favorecimiento de la inmigración clandestina.
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