La Basílica de la Virgen de los Desamparados de Valencia concluirá esta semana la pintura exterior del templo y la retirada de andamios que en estos momentos permanecen únicamente en la parte norte después de que este fin de semana hayan sido desmontados los de la fachada principal recayente a la plaza. De esta manera, el edificio quedará libre de andamios, tras ser colocados hace ocho meses para las obras de rehabilitación y pintura de sus cubiertas y fachadas, según han indicado hoy a la agencia AVAN fuentes de la Basílica.
Con la retirada de los andamios finalizarán las obras de limpieza y repintado de la portada principal y de los tejados que dan a la plaza de la Virgen que “estaban muy erosionados con el paso del tiempo”. Además, se ha restaurado la cubierta y la fachada que recaen a la plaza de la Almoina.
Por su parte, los trabajos de pintura también concluirán a finales de esta semana. Los muros de las fachadas han sido enlucidos con silicato de color “rojizo suave”, mientras que las pilastras y elementos sobresalientes han quedado pintados con “tono arena”, con lo que la Basílica “recupera su cromatismo original”. El color rojizo, que imita al ladrillo de los muros del tambor de la cúpula, ha sido muy rebajado para que tienda más a un marrón natural”.
Igualmente, el edificio anexo de la Basílica ha sido pintado en un color “azul valenciano” para que se diferencie y “distinga bien del templo”.
VLC Ciudad/Redacción