La Comisión Europea investiga a España por incumplir la normativa de prevención de riesgos laborales en la Guardia Civil

La Comisión Europea investiga a España por incumplir la normativa de prevención de riesgos laborales en la Guardia Civil

Ya se está convirtiendo en costumbre que tanto el Gobierno como quienes mandan en la Guardia Civil no parezcan preocuparse más que por sus propios intereses, perjudicando y poniendo en riesgo a los trabajadores del Cuerpo.

Fue en el año 2006 cuando el Tribunal de Justicia Europeo condenó a España por incumplir la Directiva marco sobre riesgos laborales, al no aplicarla en la Guardia Civil. Sin embargo, y a pesar del tiempo transcurrido, la Guardia Civil sólo cumple en parte dicha Directiva, continuando con una política de ocultismo, falta de información e incumplimiento reiterado en materia de Riesgos Laborales.

Uno de esos incumplimientos es el relativo a la figura de los representantes de los trabajadores en materia de Riesgos Laborales (Delegados de Prevención), que existen en cualquier empresa y administración y que, sin embargo, nuestro director y altos mandos se niegan a que existan en la Guardia Civil, contradiciendo con ello, no solo la directiva europea, sino los fundamentos jurídicos de la sentencia del alto tribunal del año 2006 que deja claro que la Directiva es de plena aplicación en la Guardia Civil.

Por ello, AUGC se ha dirigido tanto a los mandos de la Guardia Civil, como al director general del Cuerpo y el propio presidente del Consejo de la Guardia Civil (Ministro del Interior), sin que se respetasen la legalidad vigente en ésta materia.

Ni tan siquiera sus denuncias ante la Inspección de Servicios de la Secretaría de Estado dieron resultado, lo que nos obligó, una vez más a acudir, ante la Comisión Europea.

Para vergüenza de todos, nuevamente Europa sí se preocupa por lo que a nadie en España parece preocuparle (la salud de los guardias civiles) y considera que podría existir un incumplimiento de la Directiva Europa y por ello, en fechas recientes acordó transferir la denuncia a la aplicación EU Pilot con número 7307/15/EMPL y remitir escrito a España para que informe e intentar buscar una solución.

Una vez recibida la contestación la Comisión adoptará una decisión y en su caso (de modo previsible salvo que modifiquen la legislación) abrirá expediente contra España.

Estamos cansados de observar a compañeros expedientados día tras días, tenemos el reciente caso del compañero Sergio que por un insulto ingresó en prisión militar a cumplir cuatro meses de condena, ¿Nadie es responsable de los incumplimientos respaldados desde la Dirección General de la Guardia Civil que impiden el ejercicio de derechos a los guardias civiles? ¿Dónde está la fiscalía de siniestralidad laboral cuando los guardias civiles sufrimos accidentes o se nos expone a riesgos innecesarios e injustificados? ¿Cómo puede la Guardia Civil instruir diligencias por delitos por temas relacionados con la seguridad laboral si es la que más incumplimientos realiza?

Además de la condena del año 2006 y este nuevo procedimiento, España ya fue condenada en el año 2010 por que la Guardia Civil incumplía una Directiva de ordenamiento del tiempo de trabajo. Ha sido nuevamente la Comisión Europea quien, tras denuncia de AUGC abrió otro expediente a España que obligó a modificar la jornada laboral a finales del 2014. Nuevamente Europa, tras denuncia de AUGC obligó a la Guardia Civil (que hasta ese momento se negaba) a crear las oficinas de Riesgos Laborales, y finalmente, otra denuncia de AUGC ha permitido que Europa obligue a la Guardia Civil a regular la figura del trabajador nocturno y a comprometerse para tener evaluados los riesgos de los puestos de trabajo antes de julio de 2015.

Por ello, desde AUGC queremos agradecer a la Comisión Europea su preocupación por la salud de los guardias civiles, algo que debería hacer nuestra Dirección General pero que, a la vista está, poco le importa nuestra salud, pues está más preocupada en que nuestra remilitarización.

Con más de 30.000 afiliados, AUGC es la decana de las asociaciones profesionales y la mayoritaria en el Consejo de la Guardia Civil. Cuenta con representación en todo el territorio español, en cada una de las unidades y especialidades del Cuerpo y viene liderando el movimiento asociativo desde la llegada de la democracia, cuando nació como un sindicato clandestino. Su lucha por la democratización y la desmilitarización de la institución le valió en 2010 el Premio Nacional de Derechos Humanos que concede la Asociación Pro Derechos Humanos de España (apdhe).

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