La Empresa Municipal de Transportes de Valencia (EMT) informa que, como ya se anunciara ayer, finalmente procederá mañana viernes a oficializar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) por el que se podrán ver afectados más de 200 trabajadores.
Los representantes sindicales de la entidad han expuesto los procedimientos y reuniones llevadas a cabo, asegurando que la dirección de EMT sólo les ha venido citando para tratar sobre rebajas salariales y no para negociar un nuevo convenio colectivo. Afirmaciones totalmente falsas, pues de forma reiterada, la empresa les ha ofrecido un convenio a 2 años que ha sido continuamente rechazado.
De hecho, la oferta presentada por los sindicatos para hacer frente al actual presupuesto de EMT Valencia está totalmente alejada de la realidad, puesto que solamente han planteado un 5% de media de rebaja salarial, con lo que no se solucionan las tensiones de tesorería ni se garantiza la viabilidad económica de la empresa.
Reconocen que los despidos supondrán un coste de casi 5 millones de euros
En este sentido, la cantidad de entre 6 y 7 millones de euros a la que han hecho referencia como coste de la aplicación del ERE (en realidad no superaría los 5 millones de euros), podría suponer un alivio de la situación a muy corto plazo, como mucho para salvaguardar el año 2012, pero como ya se ha venido explicando, la intención del ayuntamiento y de la empresa es que ésta siga siendo de titularidad pública, lo que para ello hace necesario aplicar una serie de medidas de ajuste que permitan garantizar el futuro y la sostenibilidad de la empresa a medio y largo plazo.
Por esto mismo, no se trata de poner ‘parches’ que arreglen los problemas a día de hoy pero no los de mañana. De ahí, que la Dirección de EMT exponga la necesidad de reestructurar la empresa para ofrecer el mayor y mejor servicio público posible a un menor coste.
Y en esto, es en lo que EMT viene trabajando en estos últimos años. En una redistribución de recursos que permita su optimización y en readaptar la oferta de autobuses a las necesidades actuales de movilidad, todo ello para seguir obteniendo una mayor eficiencia del servicio a un menor coste como ya se está produciendo con la mejora de la velocidad comercial o un mayor número de kilómetros recorridos.
Así pues, el objetivo de la Dirección de EMT Valencia no es otro que intentar alcanzar un acuerdo razonable y realista, con esfuerzos totalmente asumibles por todos y adaptados a las circunstancias, sin que el servicio ofertado se vea afectado, y si es posible, sin realizar ningún despido, tal y como se han hecho en otras empresas. Y todo ello por conseguir un modelo de empresa con garantía de futuro, con unas condiciones económicas y laborables eficientes y sostenibles.
Por esto, los representantes sindicales no pueden ni deben acusar a la empresa de querer imponer miedo ni amenazar a los trabajadores, pues son muchos los meses que la entidad lleva realizando propuestas constructivas e invitando a sentarse a negociar. Pero lo cierto es, que hasta el momento, y tras las reuniones llevadas a cabo, los Sindicatos no han hecho nada por evitar el ERE. Se han dedicado a inflar las cifras y distorsionar la realidad. De hecho, afirman que han propuesto dejar de percibir un 5% en cuanto a complementos salariales, sin especificar en ningún momento a qué tipo de complementos se refieren.
En esa misma línea de no ceñirse a la realidad, han recalcado nuevamente la necesidad de que exista un mediador, concretamente el Director General de Trabajo, Joaquín Vañó. Algo a lo que la empresa ya se comprometió públicamente y que les ha reiterado su aprobación en las dos últimas reuniones mantenidas.
VLCCiudad/Redacción