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Las labores de limpieza y desescombro del edificio incendiado en Campanar avanzan con rapidez. Se estima que la reconstrucción total del inmueble, que sufrió un trágico incendio en febrero, estará lista en dos o tres años, permitiendo que los propietarios puedan volver a sus hogares.
Los trabajos de rehabilitación del edificio de Campanar, afectado por un devastador incendio que dejó diez víctimas mortales y destruyó 138 viviendas el pasado febrero, están en plena marcha. A día de hoy, la fachada del edificio luce completamente blanca, tras ser limpiada de los restos del incendio, y la primera planta ha sido completamente vaciada, lo que representa un primer paso crucial hacia la reconstrucción de la finca. Las autoridades municipales y las compañías aseguradoras trabajan conjuntamente para llevar a cabo las tareas de rehabilitación, con un presupuesto total que asciende a más de 2,6 millones de euros.
Avances en la rehabilitación del edificio
Las actuaciones comenzaron el 2 de septiembre, tras recibir el visto bueno del Ayuntamiento de València para la ocupación de la vía pública y la instalación de un cerramiento provisional. El primer objetivo de los trabajos ha sido la limpieza de la fachada y el vaciado de las plantas bajas, que estaban llenas de escombros tras el colapso parcial del edificio provocado por el incendio. Según las autoridades, el proceso de desescombro durará al menos cuatro meses, y se estima un coste de 1,5 millones de euros, que será cubierto por las aseguradoras.
Las aseguradoras también han asumido los 1,1 millones de euros necesarios para la redacción del proyecto de reconstrucción, un paso clave para devolver la habitabilidad al edificio. Según el calendario previsto, los trabajos de reconstrucción podrían prolongarse durante dos o tres años, dependiendo de la complejidad de las intervenciones que se requieran para asegurar la estabilidad estructural del inmueble.
El trágico incendio: seis meses después
El incendio, que ocurrió el 22 de febrero de 2024, marcó profundamente a los vecinos del barrio de Campanar y a toda la ciudad de València. Según el informe de la policía científica, el origen del fuego fue un único foco en el frigorífico de la vivienda número 86, desde donde las llamas se extendieron rápidamente por todo el edificio, causando una devastación total en cuestión de horas.
El trágico suceso se cobró la vida de diez personas y dejó sin hogar a cientos de familias. De inmediato, el Ayuntamiento de València puso en marcha un plan de emergencia para realojar a los afectados, la mayoría de los cuales fueron trasladados temporalmente a un edificio de viviendas públicas en el barrio de Safranar. En total, 99 familias fueron realojadas en esta primera instancia.
Situación actual de las familias afectadas
El 22 de agosto se cumplió medio año desde el incendio, y aunque el proceso de reconstrucción ha comenzado, muchas de las familias afectadas siguen enfrentándose a una situación complicada. La cesión gratuita de los pisos municipales en Safranar, que inicialmente fue por seis meses, concluyó el 26 de agosto. Actualmente, solo siete familias continúan viviendo en esos pisos, debido a circunstancias personales que están siendo tratadas con especial atención por el consistorio.
El Ayuntamiento ha mostrado su compromiso de ayudar a todas las familias afectadas, gestionando caso por caso las situaciones particulares de aquellos que aún no han encontrado una solución definitiva para su alojamiento.
La esperanza de la reconstrucción
El informe pericial encargado por los propietarios del edificio a principios de junio trajo una noticia esperada y alentadora: el edificio de Campanar es rehabilitable. Esta conclusión fue recibida con alivio por los propietarios de las viviendas, quienes desde el principio han mostrado su deseo de reconstruir el edificio y regresar a sus hogares lo antes posible.
El proyecto de rehabilitación incluye la reconstrucción completa de las viviendas y la restauración de la fachada y las instalaciones comunes. Se espera que los trabajos de reconstrucción no solo devuelvan la estructura a su estado anterior, sino que también mejoren las medidas de seguridad y habitabilidad del edificio, adaptándolo a las normativas actuales de seguridad contra incendios.
Reflexión final
El proceso de rehabilitación del edificio de Campanar es un recordatorio de la importancia de la seguridad en los hogares y de la capacidad de la comunidad para unirse en momentos de crisis. ¿Crees que las medidas de seguridad en los edificios deberían revisarse con mayor frecuencia? ¿Cómo podemos, como comunidad, apoyar a las familias que aún se recuperan de este trágico suceso?
Es nuestra arma para acabar con la impunidad de los más poderosos.
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