Se han cumplido dos meses desde la salida de España de la fragata ‘Navarra’, que continúa con su actividad en aguas del Océano Índico
Esta semana la fragata ‘Navarra’ vuelve a retomar su actividad después de haber zarpado del puerto de Fujairah (Emiratos Árabes). Este puerto sirvió de descanso para la dotación y de mantenimiento del buque, tras haber permanecido un periodo de veinte días en la mar con tareas de vigilancia marítima e inteligencia.
La misión, en el marco de la operación Atalanta, se inició prestando escolta a uno de los buques mercantes del Programa Mundial de Alimentos; posteriormente el mando de la Fuerza Naval de la Unión Europea (EUNAVFOR, por sus sigla en inglés) ha ido asignando zonas de patrulla a la ‘Navarra’ para contribuir a la seguridad marítima en la región y a la disuasión de la piratería, así como control de tráfico en la mar y reconocimiento de la costa para detectar la posible preparación de grupos piratas.
Es de destacar también la asistencia que se prestó a dos veleros francés que se encontrabas a la deriva en aguas del Océano Indico, uno a principio de misión y el último hace escasos días. En ambas ocasiones se informó a los tripulantes de las actividades que está desarrollando la agrupación naval bajo el mando de EUNAVFOR en la zona, y se les alertó del riesgo al que estaban expuestos si continuaban su viaje en aquellas aguas por la actividad de piratería. Tras recibir la asistencia necesaria, los dos veleros continuaron su navegación tras agradecer la ayuda recibida.
En el desarrollo de dichos cometidos se han realizado aproximaciones amistosas a pesqueros en las aguas del golfo de Adén, con el fin de seguir aumentando el conocimiento del entorno marítimo de la zona y dar a conocer la misión de EUNAVFOR a la comunidad marítima local y se han visitado varios ‘dhows’ (embarcaciones típicas de la zona), que se mostraron colaboradores en todo momento.
Como muestra de la actividad diaria, se muestra una maniobra de aprovisionamiento en la mar con el buque logístico norteamericano ‘Laramie’; difícil maniobra para relleno del combustible necesario para seguir operando en la zona que se realiza mientras los dos buques siguen navegando.
Otra de las actividades diarias es el vuelo del ‘Gato’, helicóptero de a bordo. Estos vuelos son el mejor instrumento que usa nuestra plataforma para recopilar buena parte de la información que luego se remite al Cuartel General de Atalanta.
Los vuelos se aprovechan para el adiestramiento e instrucción de la dotación; por ejemplo entrenando una evacuación en helicóptero de un herido a bordo. El helicóptero, en vuelo estacionario, iza la camilla con el herido desde la cubierta de vuelo para transportarlo donde se le pueda dar asistencia sanitaria cualificada. También se simulan diferentes emergencias, como el incendio dentro del helicóptero y el posterior rescate de su dotación por el personal del trozo de vuelo.
La fragata navega ya, cumpliendo el mandato de la Agrupación, en la zona asignada del estrecho de ‘Bab El Mandeb’ en el enlace entre el mar Rojo y el golfo de Adén, siendo esta una zona de mucho tráfico marítimo de todo tipo de embarcaciones.
VLCNoticias|Redacción