Sobre las 10.00 horas del pasado día 12 de septiembre, un guardia civil fuera de servicio que practicaba deporte en la afueras de la localidad de Siete Aguas, observó en el fondo de un terraplén a una persona de avanzada edad que pedía socorro con la voz entrecortada.
Inmediatamente, el agente se dirigió al lugar donde se encontraba esta persona, a la vez que pedía apoyo a la Guardia Civil de Siete Aguas, comprobando en todo momento el estado de dicha persona, la cual sufría múltiples arañazos y heridas sangrantes poco profundas.
El agente, que se encontraba fuera de servicio en esos momentos, permaneció asistiendo y tranquilizando al accidentado, un varón de 85 años, hasta que llegó otro agente uniformado de la Guardia Civil y entre los dos consiguieron levantar a esta persona que estaba tumbada en el suelo.
Una vez consiguieron rescatarlo y ante la necesidad de recibir asistencia médica para prevenir cualquier lesión más grave, se procedió a su traslado en el vehículo oficial hasta el Centro de Salud de la localidad de Siete Aguas.
Una vez más, se pone de relieve la vocación de servicio continua que muestran los miembros de la Guardia Civil, que en este caso concreto, gracias a la determinación y rapidez con que actuaron los agente, se evitó un mal mayor.
VLC Noticias | Redacción