Los rocieros de Valencia han visto cumplido uno de sus sueños: hacer el camino a la Basílica de la Virgen de los Desamparados y, además, hacerlo en el 25 aniversario de su constitución como asociación pública de fieles.
Más de 300 personas de la Hermandad del Rocío de Valencia, muchas ataviadas con trajes andaluces, entre simpatizantes y hermanos han participado en la peregrinación que ha partido a las 11,30 horas desde la plaza de los Ángeles del Cabanyal, con una hora y media de retraso, hacia la otra plaza, la más mariana de todas las de la ciudad, la de la Virgen.
La comitiva la encabezada varios hermanos con el tamboril y la flauta, el instrumento típico andaluz, para dar paso a los rocieros entre cánticos y palmas y viéndolos pasar la presidenta de la Federación de Entidades Culturales Andaluzas, Puri Torres, con la vista puesta en el Simpecado, donde están las figuras de San Vicente Ferrer y San Juan de Ribera.
Gentes de la hermandad venidas desde Sagunto, Museros, Massamagrell, Alfafar o desde el propio Cabanyal componían un cortejo en donde también figuraban algunos componentes de la Semana Santa Marinera, como algún cofrade de la Hermandad del Silencio, y el propio consiliario, José Luis Barrera, que está con ellos la friolera de los 25 años.
Caras de alegría y de contenida devoción se veía en quienes cada año hacen un camino, el del Rocío, cuyo, coste puede oscilar entre los 450 o los 650 euros dependiendo de los días de participación.
Cogió pues la comitiva la calle Antonio Juan escoltadas por efectivos de la Policía Local de Valencia para tomar Serrería y de inmediato coger la avenida de los Naranjos, la zona de las universidades, y seguir por Vicente Zaragoza para, finalmente, tomar la calle Almassora y atravesar el puente peatonal de los Serranos y parar en la entrada de la ciudad, en las Torres de Serranos. Todo bajo la guía del alcalde de Carretas, Bartolomé de la Torre.
La llegada a las Torres de Serranos
El grupo se recompuso para entrar en orden a la plaza de la Virgen y de ahí a la misa en la Basílica que ofició el arzobispo de Valencia, Carlos Osoro. De entre los rocieros emanaron los recuerdos de cuando bendijeron la carreta que ahora volvían a llevar ante la patrona. Uno de ellos, Rafa, iba impecablemente vestido de traje color negro y su amor a la Blanca Paloma ha ido in crescendo orgulloso de salir desde las tierras valencianas.
El pastor de la iglesia valenciana los recibió con los brazos abiertos ante la Virgen de los Desamparados que los rocieros llevan con orgullo y honor en el frontal de la carreta.
Terminaba una romería donde la lluvia también les quiso acompañar a una carreta remozaba en un trabajo salido de Vicente Martinez Estelles de Llosa de Ranes, uno de los mejores retablistas de España. Le ha dado mayor realce para que tenga su mejor camino.
Culminaba una romería con un arduo trabajo de la hermana mayor, Gregoria Payán, y toda su junta directiva sin dejar de lado a los hermanos. Una labor que se ha fraguado en su sede de la calle Arquitecto Alfaro, en el barrio del Grao.
El pregón tendrá lugar mañana en el Cabanyal
Ahora les quedan dos actos antes de empezar el camino. Uno será mañana en la iglesia de los Ángeles del Cabanyal a las 13 horas con la celebración del último día del triduo y después el pregón de la Romería 2013 por Miguel García Franco, un especialista en el mundo rociero. Luego los rocieros e invitados acudirán a un vino de honor al salón parroquial. El otro será el 4 de mayo con una cena rociera.
Todo esto ha sido el prólogo del Camino del Rocío 2013 que empezará el 13 de mayo desde la misma plaza del Cabanyal y acabará el 20 de mayo.
Éste año con el honor de ser la última hermandad en pasar por delante de la Blanca Paloma en la iglesia de la aldea de Almonte. Les ha tocado por sorteo pero vaya suerte y orgullo.
VLC Ciudad/Redacción