Con la visita estelar de Miguel Induráin, mito vivo del ciclismo español, la Peña Ciclista Excursionista de Valencia dio ayer el pistoletazo de salida a los fastos por su 90 aniversario con la inauguración de la exposición fotográfica que recoge en instantáneas, desde el blanco y negro hasta el color digital, 90 años de ciclismo en Valencia y provincia.
El escenario escogido, el vestíbulo de la biblioteca del Complejo Deportivo y Cultural La Petxina, se hallaba ayer repleto de aficionados al ciclismo y personalidades del mundo del deporte valenciano, como Quique Gutiérrez, el inolvidable Javier Castellar o Ángel Casero, sin olvidarnos de Fernando Escartín, Stefano Garzelli y, ya fuera del panorama ciclista pero sí en el deportivo, el ex jugador del Valencia CF, David Albelda, que también acudió para dar apoyo al acto.
El acto comenzó con el protocolario paso por Photocall, hasta que en un momento dado de las mil y una sesiones fotográficas a las que se sometieron unos y otros, se produjo una imagen nunca antes lograda -o al menos no nos consta- en un solo acto: 18 podios de las conocidas como las Tres Grandes -Giro de Italia, Tour de Francia y Vuelta a España- estaban juntos y preparados para hacerles una foto. Y tuvimos el enorme honor de poder recogerla los medios valencianos.
También estuvo presente el presidente de la Federación Nacional de Ciclismo, J. Luis López Cerrón; el presidente de la Federación Valenciana de Ciclismo, Amadeo Olmos y el director técnico de la Vuelta a España, Francisco Giner. cuya participación en el acto no hicieron sino redundar en el engrandecimiento de un acto ya de por sí grande.
El presidente de la Peña Ciclista, Vicente Miranda, tuvo palabras de agradecimientos a sus más directos colaboradores en el empeño de traer a Valencia un evento de primer nivel como el presenciado ayer y no quiso dejar pasar la ocasión de agradecer al inigualable Miguel Induráin que con sus gestas impregnara en los niños y jóvenes valencianos el ánimo y afición por el ciclismo, además de resaltar en concreto que el bravo ciclista navarro viajara ex profeso desde Pamplona a Valencia para estar presente en el acto. Todo un detalle de quien sus propios compañeros han tenido siempre palabras de elogio destacando sobre todo lo demás su enorme calidad humana.
Junto a él, arropando el acto en representación de las administraci0nes local y autonómicas, estuvieron y participaron el concejal de Deportes del Ayuntamiento de Valencia, Cristóbal Grau, así como el director general del Deporte de la Comunitat Valenciana, Mateo Castellá -que por cierto acudió al acto ayudado por unas muletas-. Ambos resaltaron el gran arraigo que el deporte del ciclismo tiene en la ciudad de Valencia y en la Comunitat, respectivamente, en gran parte gracias a iniciativas como la que hace 90 años movieron a los pioneros valencianos a crear la Peña Ciclista Excursionista de Valencia.
También tuvo unas breves palabras Miguel Induráin, quien una vez más demostró que la sencillez y la nobleza no están reñidas, ni mucho menos, con la grandeza en el desarrollo, en este caso, de maravillosas gestas deportivas que nunca olvidaremos, a lomos de una bicicleta que además estaba allí expuesta; la que utilizó en el equipo Banesto, en auténticas etapas míticas con en Angliru, Alpe d’Huez o Mortirolo; observábamos aquella bicicleta blanca y nos hacíamos cruces de cómo aquel hombre alto, sobre aquella máquina tan sencilla, pudo adelantar y dejar literalmente secos a cuantos rivales se le presentaron subiendo aquellas famosas 21 curvas, por ejemplo, o conseguir el doblete -Giro y Tour el mismo año- en dos ocasiones, 1992 y 1993…
Que la leyenda de Miguel Induráin no solo sigue viva sino muy presente en el mundo del ciclismo actual es algo que se veía de forma muy evidente viendo como el navarro estuvo más de una hora firmando autógrafos, haciéndose fotos, sin negarle a nadie su atención aunque fuera unos segundos… Algo que sin lugar a dudas requiere una paciencia y una resistencia sin límites. Pero en estas lides también ‘Miguelón’ es un grande, como deportista y como persona.
Uno de los momentos con mayor carga simbólica tuvo lugar cuando Induráin retiró el velo que cubría la enseña original de la Peña, que había desaparecido y se ha encontrado hace poco tiempo, siendo restaurada y ahora expuesta al público por primera vez desde hace tantos años.
Otra de las auténticas ‘joyas’ que pudimos admirar era una bicicleta utilizada por uno de los peñistas en los años 40 con las llantas…, ¡de madera!. Inevitable imaginar cientos de avatares acantecidos en otras tantas carreras o excursiones sobre aquellas dos ruedas. “¿Te imaginas marchar sobre esta bici en la ‘Dauphine Libere’?”, comentábamos. Y cientos de anécdotas, cientos de míticas etapas, contrarrelojes, escapadas y pelotones salieron a relucir en una tarde en la que se respiró el arte del pedaleo por doquier.
Ahora, a disfrutar de este ya masivo deporte en nuestra ciudad y esperar que, para el centenario, podamos contar con una estrella valenciana del ciclismo que haya emergido ya en el panorama internacional puesto que, todos lo sabemos, ahora los Alberto Contador, Purito Rodríguez y Alejandro Valverde forman la punta de lanza del deporte patrio pero, ¿qué ha de venir tras ellos?
VLC Noticias | Javier Furió