Quienes ayer contemplaron la procesión más antigua de la ciudad de Valencia, la de la Virgen de la Asunción, tanto en la comitiva matinal como vespertina vieron como participaba un grupo de personas encarnando a los Apóstoles con indumentaria propia de la época.
Estos son y forman parte del llamado Grup de Metxa que se constituyó en 1977 para relanzar la procesión del Copus y fue el germén de la Asociación de Amics del Corpus. Ahora ellos tienen un fin similar al de aquel año: el de recuperaer y promocionar las tradiciones cultural y cívico religiosas de todo tipo en el ámbito de la Comunidad Valenciana.
El Grupo de Metxa en estos años ha colaborado con el Corpus de Almàssera y ha recuperado los Cirialots de Algemesí, según figura en el folleto que edita la Catedral de Valencia y colabora la alcaldía pedánea de Benimàmet-Beniferri del Ayuntamiento de Valencia.
La procesión de la Asunción es el cortejo más antiguo de la ciudad y cuya celebración había quedado cuasi en el olvido y se había convertido durante unos años en la procesión del turista porque a ella acudían quienes venían a visitar la tercera capital de España.
La jornada del año de mayores celebraciones festivas pasaba casi inadvertida para la mayoría de residentes de Valencia y sus visitantes.
Ahora esto ya no sucede y la procesión ha ganado en prestancia, solemnidad y asistencia de público.
Los componentes y dirigentes del Grupo de Metxa colabora con el Cabildo de La Catedral desde hace varios años en la celebración del cortejo portando al trono anda de la imagen de la Virgen María.
Así fue y así ocurrió ayer cuando la llevaron desde la capilla de la calle Trinquete de Caballeros hasta la Catedral e hicieron lo propio en la procesión vespertina.
La Cruz Guía encabezó el cortejo con fieles devotos detrás seguidos del Cabildo Catedralicio y la imagen de la Virgen a hombros mientras detrás iban los invitados y, finalmente, la banda de música de Almasséra.
VLCCiudad/Redacción