Valencia Noticias | Redacción.- Lambda-Colectivo de lesbianas, gays, transexuales y bisexual celebra el aniversario de la Ley 3/2007, reguladora de la rectificación registral de la mención relativa al sexo de las personas, como el Día de la Visibilidad Trans. La que fue conocida como Ley de identidad de género puso los cimientos de la igualdad para las personas transexuales y las situó en el mapa, ayudando a normalizar su documentación y sus vidas. Después de 8 años de su aprobación, sin embargo, la ley se muestra incompleta: excluye a las y los menores transexuales y las personas inmigrantes, que no pueden acceder a una documentación de acuerdo a su género. Asimismo, la ley impone una visión patologizadora de la transexualidad ya que se requiere de un informe en el que se diagnostique una “disforia de género”, concepto que estigmatiza a las personas transexuales.
Un año más se sigue visibilizando -asegura el colectivo- la transfobia social e institucional que sufren miles de personas, las cuales ven negados sus derechos más básicos o incluso llegan a sufrir violencia física únicamente por su identidad de género.
Es por esto que desde Lambda se sigue luchando para conseguir una Ley Integral de Transexualidad valenciana que recoja la realidad vivencial de las personas trans, las discriminaciones específicas que sufren y plantee las estrategias y los recursos necesarios para acabar con las injusticias que actualmente sufren los hombres y mujeres trans en ámbitos tan básicos y necesarios para el pleno desarrollo como son la sanidad, la educación o el acceso al mundo laboral.
Por su parte, Fani Boronat, coordinadora general de Lambda, remarcó que “la transfobia, o el rechazo al que se ven sometidas las personas transexuales, genera una espiral de inseguridad, vulnerabilidad y falta de autoestima que entorpece su plena integración social. El acoso escolar que sufrimos desde la infancia provoca un índice de abandono escolar difícilmente superado por ningún otro colectivo. Si a esto unimos la discriminación sistemática en el ámbito laboral, no es de extrañar que muchas personas trans, sobre todo mujeres, se vean abocadas a la marginalidad, sin ninguna alternativa“.