Hoy, 14 de febrero, se celebra en Europa el Día de la Salud Sexual y Reproductiva. La Organización Mundial de la Salud entiende ésta como “un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Es por ello que Lambda – Col·lectiu de lesbianes, gais, transsexuals i bisexuals ha aprovechado esta fecha señalada para pedir al Gobierno valenciano que incluya las técnicas de reproducción asistida para parejas de mujeres y mujeres solas dentro de la cartera de prestaciones sanitarias valencianas.
Lambda, junto a Galesh, asociación de familias homoparentales, ya trasladaron su postura y reivindicaciones en la reunión que ambas entidades LGTB mantuvieron el pasado jueves 12 de febrero con altos miembros y cargos técnicos de la Conselleria de Sanidad tras solicitar una reunión el pasado mes de diciembre mediante la entrega pública de una carta dirigida al Conseller de Sanidad.
Según declaraciones de Lambda, desde Conselleria se han comprometido a estudiar los argumentos presentados, así como la realidad y posicionamiento de las otras comunidades autónomas que han decidido no excluir a parte de las mujeres de esta prestación. Por su parte, Lambda, junto a las otras asociaciones del País Valenciano van a seguir dando pasos en común para reivindicar el derecho de las parejas de mujeres y mujeres solas al acceso a la maternidad. Una de las primeras acciones que se han marcado es enviar a la Conselleria la declaración emitida por la Sindicatura de Greuges el año pasado tras una queja presentada por Compromís, donde ésta se mostraba contraria a dicha exclusión e instaba a la Conselleria de Sanidad a que “de conformidad con la normativa vigente, garantice a las mujeres su derecho a las técnicas de reproducción asistida, independientemente de su estado civil y su orientación sexual, así como que interprete este derecho de manera global, atendiendo en primer término al principio de igualdad constitucionalmente reconocido”. Además, la resolución de la Sindicatura de Greuges cuestionaba si realmente la exclusión de las mujeres sin pareja masculina de las técnicas de reproducción asistida conllevaría un ahorro económico real y efectivo para los presupuestos públicos.
“Entendemos que la salud sexual y reproductiva debe pasar por el bienestar físico, mental y social de las mujeres, de todas las mujeres sin discriminación, y eso pasa porque se respete nuestro derecho fundamental a formar una familia fruto del deseo y la igualdad, no por la imposición ni por la exclusión”, ha afirmado Fani Boronat, coordinadora general de Lambda.