El Vaticano instaló un moderno y complejo sistema de aire acondicionado e iluminación LED diseñado para destacar más y proteger de la suciedad, polvo y sudor a las obras de arte pintadas en sus paredes por el genio de Miguel Ángel Buonarotti en la Capilla Sixtina.
El Vaticano reveló el miércoles un moderno sistema de aire acondicionado e iluminación diseñado para destacar aun más las preciosas pinturas al fresco de la capilla y protegerlas de suciedad, polvo y sudor de los casi seis millones de visitantes anuales que se maravillan con ellas.
El proyecto con costo de tres millones de euros y tres años de duración fue emprendido debido a que el sistema de aire acondicionado anterior, instalado hace 20 años cuando sólo 1,5 millones de personas visitaban la capilla al año, fue incapaz de mantener los niveles de humedad y temperatura necesarios para conservar los frescos.
Antonio Paolucci, director de Museos del Vaticano, dijo que el cambio era apropiado ya que la Santa Sede está conmemorando el 450 aniversario de la muerte de Miguel Ángel “con algo perdurable, no efímero: asegurar desde un punto de vista climático la obra maestra de Miguel Ángel Buonarotti y darle la iluminación correcta”.
El sistema de aire acondicionado ajusta los niveles de flujo de aire, humedad y temperatura utilizando 70 sensores montados en las paredes de la capilla y dos cámaras de televisión de circuito cerrado que cuentan el número de personas en el interior en un momento dado.
El sistema mantiene la capilla fresca en un rango de 20-25 grados centígrados y mantiene las partículas de polvo y el flujo de aire dentro de los parámetros establecidos por expertos en arte del Vaticano.
El sistema de iluminación, por su parte, cuenta con 7.000 luces LED ajustadas para resaltar de la mejor manera el fondo azul profundo del ‘Juicio Final’ de Miguel Ángel, y mostrar mejor los frescos que representan la vida de Moisés y de Cristo a lo largo de las paredes de la capilla. Esos frescos, de Botticelli, Perugino, Domenico Ghirlandaio y otros, han representado durante mucho tiempo el papel de teloneros ante las obras maestras de Miguel Ángel en el cielo raso y el altar, en parte debido a que el sistema de iluminación anterior los dejaba literalmente en la oscuridad.
La tecnología LED le ahorrará al Vaticano más del 80% de los costos de energía y ofrecerán un mejor visionado de los frescos.
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