Una nueva investigación estudia el contenido de ácidos grasos trans en los productos de alimentación más consumidos en los supermercados españoles. La gran mayoría de ellos contienen menos de 0,2 gramos por cada 100 gramos y menos del 2% respecto al porcentaje de grasas totales.
La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición acaba de publicar en la revistaGaceta Sanitariaun estudio en el que se analiza el contenido de ácidos grasos trans en 277 de los productos de alimentación más consumidos en los supermercados españoles. La gran mayoría de ellos, según los resultados, contienen menos de 0,2 gramos por cada 100 y menos del 2% respecto al porcentaje de grasas totales.
La evidencia científica ha demostrado que el consumo de ácidos grasos trans está asociado con varias enfermedades cardiovasculares y son varias las investigaciones que también los relacionan con otras enfermedades como la diabetes mellitus, el cáncer o el asma.
Por ello, a pesar de que la legislación española no regula todavía su contenido, sí dedica una disposición específica en la Ley 17/2011 de seguridad alimentaria y nutrición a la reducción de los niveles de ácidos grasos trans artificiales, fruto de la hidrogenación parcial de aceites vegetales en los procesos de la industria alimentaria.
La legislación española no regula todavía su contenido, pero sí dedica una disposición específica en la Ley 17/2011 de seguridad alimentaria y nutrición
El estudio analizó en 2015 los niveles de ácidos grasos trans por grupos de productos alimentarios y los comparó con los de otro trabajo realizado en 2010. Muchos de los grupos de alimentación han logrado reducir los niveles de sus productos durante estos últimos cinco años.
Los snacks salados, los productos de pastelería y confitería, chocolates, galletas y patatas chips son los grupos que más han reducido su contenido.
Mantener la vigilancia sobre las grasas trans
Los investigadores también han comprobado que algunos grupos de alimentación no contienen grasas trans en sus productos. Es el caso de las siete muestras analizadas de cereales, las 24 de galletas, 11 de pan industrial y 13 de salsa de tomate.
En cuanto a la proporción de ácidos grasos trans respecto al total de grasas, en 2015 fue inferior al 2% en todos los grupos de productos a excepción de los yogures y productos lácteos (2,3%), la mantequilla (2,45%) y los quesos para untar (2,52%), aunque los productos lácteos, junto con las carnes, pueden contener grasas trans de origen natural.
La principal conclusión del estudio es que el contenido medio de ácidos grasos trans de los productos alimenticios en España es bajo, y que en el contexto de una dieta equilibrada, la exposición de la población a este tipo de grasas es mínima.
“No obstante, la vigilancia periódica del contenido de ácidos grasos trans de los alimentos debe mantenerse. Como un objetivo de salud pública, la reformulación de los productos alimentarios se debe reforzar con el fin de asegurar que la calidad nutricional de los alimentos se mejora”, concluyen los autores de este trabajo.
Referencia bibliográfica:
Napoleón Pérez-Farinós et al. Trans-fatty acid content of food products in Spain in 2015. Gac Sanit2016;30:379-82 – Vol. 30 Num.5. Disponible en: http://gacetasanitaria.org/en/trans-fatty-acid-content-food-products/articulo/S0213911116300528/