El Péndulo | Redacción.- Reconocidas obras de género negro, novelas de destacados autores de la Comunitat y las últimas entregas de las sagas juveniles, entre los libros más leídos en las Bibliotecas Municipales de València en el primer semestre de 2017.
En el apartado de narrativa en castellano para adultos, dos de los tres libros más solicitados se corresponden con los Premios Planeta más recientes: ‘Todo esto te daré’ (Dolores Redondo), ganador en 2016, ocupa el primer lugar, mientras su antecesor en el palmarés, ‘Hombres desnudos’ (Alicia Giménez Bartlett), aparece como el tercero más demandado. Entre ambos se encuentra uno de los grandes best-seller internacionales del año, ‘La chica del tren’ (Paula Hawkins), mientras Santiago Álvarez aparece como el primero de los autores valencianos de la clasificación gracias a su novela negra ‘El jardín de cartón’.
En lo que se refiere a las novelas en valenciano, la que encabeza el ranking es otra obra de género negro: Rosy & John, del prestigioso escritor y guionista francés Pierre Lemaitre. A continuación encontramos las novelas ‘Els ossos soterrats’, del alcoyano Silvestre Vilaplana, y ‘Les darreres paraules’, de la mallorquina Carme Riera.
Los tres títulos en castellano más leídos de literatura juvenil incluyen las últimas entregas de conocidas series como Gerónimo Stinton (Octavo viaje al reino de la fantasía), Diario de Greg (Buscando plan) y El corredor del laberinto (La cura mortal). Por su parte, los principales libros de juvenil en valenciano son Una lectura perillosa (Lourdes Boïgues i Chorro), El millors del 22 (Vicent Dasí) y La banda dels mitjos lladres (Pasqual Alapont).
Por último, las obras infantiles de ficción más solicitadas han sido ‘Los monstruos tienen miedo de la luna’ (Marjane Satrap), ‘La oveja Carlota’ (Ann Stohner) y ‘¿A qué sabe la luna?’ (Michael Grejniec), mientras que la más destacada en valenciano es ‘Per molts anys!’, del artista de L´Alcúdia Dani Miquel. Tras ella se sitúan, por este orden, ‘De quin color són els bessos’ (Rocío Bonilla) y ‘Els fantasmes no toquen a la porta’ (Eulàlia Canal).