El Valencia Firebats labó la mala imagen que dio ante el Grenobble en la Liga europea y se impuso por un más que contundente marcador a los Blue Devils austriacos, en un partido marcado por el enfado del cuerpo técnico visitante, que llegó a plantearse seguir el partido.
El festival valenciano fue total en su despedida europea ante un equipo que en ningún momento pudo plantar cara a los locales. Las carreras se sucedían una tras otra y el marcador iba engordando casi al mismo tiempo que corría el cronómetro.
Ante la humillación que estaban sufriendo, los técnicos austríacos llegaron a parar el partido e instaron a sus jugadores a abandonar la cancha, ya que aludían a que el terreno de juego no estaba en condiciones para practicar el este deporte, debido al mal estado del césped. Sin embargo, los jugadores del Blue Devils quisieron acabar el choque, que conluyó con la contundente victoria de 104-0.
VLCCiudad / Pepe Aguilar