Los más de mil belenes benéficos elaborados manualmente con materiales de desecho por el fraile capuchino valenciano Conrado Estruch para atender a familias necesitadas, se han “agotado completamente”, según ha indicado a la agencia AVAN el religioso que ha clausurado ya la exposición.
Los belenes “duraron sólo tres días” tras la apertura de la muestra en Valencia, ya que fueron adquiridos con donativos por numerosas familias, jóvenes y feligreses.
Este año, la exhibición que ha permanecido abierta en el convento de los capuchinos en la calle Cirilo Amorós, 67 incluía nacimientos elaborados con diferentes tipos de materiales de desecho, como juguetes, maderas, máquinas de escribir y de coser, calabazas, así como restos de material tecnológico en desuso, como ordenadores, radios o teléfonos móviles.
A pesar de la crisis, “el ritmo de donativos ha sido muy bueno”, según ha indicado hoy a la agencia AVAN fray Conrado Estruch que ha expresado su gratitud a todos las personas que se han acercado a la muestra.
Los donativos serán destinados a la atención de las necesidades de más de 200 familias valencianas sin recursos, también a la Casa Cuna Santa Isabel, al Cottolengo del Padre Alegre, a la asociación para la Defensa de la Vida Provida y a misioneros de la orden capuchina en Somalia, Guinea Ecuatorial, Bolivia, Colombia y Honduras.
La exposición, que este año ha cumplido su 19 edición y en la que colabora el grupo Amigos de San Antonio, fue bendecida por el arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro.
VLC Noticias | Redacción / AVAN