Entre otras dinámicas, han participado en un simulacro desarrollado en una sucursal bancaria
Los 32 negociadores de la Policía Nacional se han reunido en Madrid durante dos días para actualizar sus conocimientos operativos. Cada uno de ellos ha recibido ya el curso básico de negociador -de un mes y medio de duración- y perfecciona sus conocimientos cada año en el marco de las Jornadas de Negociadores Policiales. En sus respectivos destinos, los negociadores se encargan de conseguir una solución pacífica a incidentes críticos como toma de rehenes, amenazas colectivas o intentos de suicidio.
La Policía Nacional cuenta en cada Jefatura Superior de Policía con al menos un negociador: un agente especializado en la resolución de incidentes críticos en los que la aplicación de una comunicación estratégica resulte imprescindible. Estos especialistas acuden a situaciones usualmente caracterizadas por un clima de nerviosismo como secuestros, toma de rehenes o atrincheramientos de riesgo.
La palabra como arma
La principal arma de un negociador policial es la palabra. La comunicación con los autores del incidente resulta crucial para tratar de rebajar la tensión inicial, ganar tiempo e información y conseguir finalmente una solución pacífica; todo ello con el menor riesgo posible para los rehenes, autores y los propios agentes actuantes.
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La Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría General de Policía Judicial es la encargada de organizar anualmente unas jornadas de actualización y perfeccionamiento dirigidas a todos los negociadores de la Policía. Durante los días 3 y 4 de diciembre de 2015, los participantes en estas jornadas, reunidos en Madrid, han compartido criterios de actuación, unificado nuevas informaciones y valorado las principales actuaciones llevadas a cabo en los últimos meses.
Las actividades contempladas en estas jornadas abarcan dinámicas tanto prácticas, por ejemplo un ejercicio con simulacro de incidente crítico en una sucursal bancaria; como teóricas, con ponencias de agentes expertos sobre comunicación táctica, operaciones especiales, secuestros y extorsiones, infografía y herramientas tecnológicas para evaluar una situación de crisis. Además, los agentes de la Policía Nacional cuentan con la colaboración de un doctor en Psicología especializado en personalidad y negociación.