Valencia Noticias | Redacción.- La II edición de la Halloween Road, organizada por GULA Sport y el Master de Gestión Deportiva de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), ha congregado a más de 1.500 participantes cosechando, un año más, todo un éxito de participación y diversión.
La carrera más terrorífica del panorama valenciano, que se hace realidad gracias a todos los colaboradores y patrocinadores, se ha consolidado como la alternativa más saludable, divertida y familiar de la tarde-noche de Halloween. El 65% de los participantes han sido mujeres y los niños de entre 8 y 14 años han sido los más numerosos.
La Marina Real Juan Carlos I de Valencia fue anoche el escenario de una cita de running diferente, una carrera “divertida, familiar y única” de 4 kilómetros en la que han trabajado más de 200 profesionales entre técnicos, artistas y especialistas.
En su recorrido de 4 kilómetros, con 15 puntos de animación, los participantes se han encontrado sorpresas, brujas, monstruos, sustos y mucha diversión. Durante la prueba, unos 150 animadores y actores han interactuado con todo el público en cada kilómetro.
Más que una carrera
La Halloween Road no ha sido solo una carrera, sino un divertido evento que ha comenzado a las 18:00 horas con el Fun Park y ha acabado a medianoche con la Valencia Zombi Party, que ha contado con la entrega de premios, un Flashmob Thriller y una Fiesta Zombi como colofón a la noche más terrorífica del año.
Desde media tarde, en el Fun Park, todos los participantes han podido disfrutar de juegos, música y bailes como el Zombi-Zumba o concursos de disfraces y han podido inmortalizar “un momento de muerte” en un photocall muy especial.
Además, durante el Fun Park, han podido bailar al ritmo de tres coreografías “de miedo”, que han corrido a cargo de la Academia Magic Dance, Atlanta Club Spa y la Escuela Sara Guirado.
Premios terroríficos y…, sabrosos
El objetivo, además de divertirse, también ha sido participar con el mejor disfraz. Más de una veintena de maquilladores de Tevian han dado el último retoque a todos los corredores. Tanto los mejores maquillajes como los disfraces más terroríficos y creativos han sido premiados al finalizar la prueba.
Por otro lado, y al igual que el año pasado, Casino Cirsa Valencia ha organizado divertidas acciones al final de la carrera. Los participantes han tenido que esquivar a una horda de zombies que trataban de arrebatarles “una vida Cirsa” (un adhesivo). El vencedor (quien ha conseguido cruzar la meta con la pegatina) podrá canjearla por una entrada y una copa gratis en el casino. Además, Casino Cirsa Valencia regala a los primeros clasificados una cena para dos para cualquiera de los viernes gastronómicos de noviembre.
Carácter solidario
La II Edición de la Halloween Road también ha puesto en marcha, con total éxito, la Campaña Solidaria “Trae tu juguete” en colaboración con la asociación Ambessa para contribuir a la construcción y el equipamiento de un hogar para 100 menores en situación de desamparo y orfandad en Etiopía.
El proyecto Ankelba pretende la adecuación de una casa de acogida, en los alrededores de Addis Abeba, para niños con edades comprendidas entre los 3 y los 10 años, un proyecto en el que ya colaboran personalidades del mundo del deporte, como Pepe Reina y Steven Gerrard, portero y capitán del Liverpool club de fútbol.
A estas colaboraciones se ha sumado la compañía juguetera Hasbro, que este año ha colaborado con la Halloween Road para promover a través del deporte y el ocio la solidaridad con los colectivos más desfavorecidos. Para ello, ha aportado 20 unidades de Nerf Elite Jolt, uno de los juguetes más demandados por los menores españoles con el objetivo de encontrar su dueño entre los 100 menores del orfanato de Addis Abeba.
Es nuestra arma para acabar con la impunidad de los más poderosos.
Te necesitamos a ti también para seguir haciendo un periodismo libre de presiones políticas y económicas
Hay mucho trabajo detrás de una noticia. Contrastar fuentes, redactar, analizar, recabar información… Pero todo esto implica unos costes muy altos, porque aunque parezca una obviedad, hacer buen periodismo, en estos momentos, es complicado.