El cante de Mayte Martín llega mañana, domingo 11 de noviembre a las 19 horas, al Espai Rambleta de Valencia, con su apuesta, desde la austeridad, por la reivindicación del cante antiguo y la creatividad sonora, con una marcada alergia al artificio y los aspavientos.
Mayte Martín es cantaora flamenca, pero en realidad es cantaora de historias tan personales que son por fuerza universales. “El flamenco es mi origen, pero no mi yugo” afirma la artista.
El contenido y la estética musical-artística de este espectáculo cuenta con una cuidadísima selección de las más bellas y conmovedoras letras populares, este concierto recoge –bajo el filtro sonoro de la sutileza y la elegancia melódica que caracterizan a Mayte Martín–, obras maestras del repertorio flamenco clásico prácticamente en desuso; cantes preciosos que nunca antes se habían escuchado en voces contemporáneas. Es un delicado trabajo de reconstrucción y recreación que revitaliza lo antiguo potenciando su infinita belleza y respetando profundamente toda su esencia.
Mayte Martín se inició en un concurso celebrado en 1985, pasando a actuar en las peñas flamencas radicadas en Cataluña. Su calidad la ratificó en Córdoba, en 1989, concediéndole otro trofeo nacional. Cantaora, buena guitarrista y compositora flamenca.
La aparición de Mayte fue un revulsivo en el panorama flamenco catalán; ella ha sido animadora y guía en los comienzos de gentes como Miguel Poveda. Tras las huellas de Mayte ha surgido un importante contingente cantaor. Mayte interpreta el flamenco con una dulzura emocionante y un conocimiento fundamental.
Su repertorio es largo y ancho, mas el amor por el flamenco en Mayte no excluye, como ocurre en muchos casos, la pasión por otras músicas. Su trabajo, en compañía del eximio pianista de jazz Tete Montoliú, fue un brillante álbum de boleros Mayte Martín es, sin duda, una de las voces flamencas de mayor proyección.
VLCCiudad/Redacción