El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, ha señalado esta mañana, durante la misa previa a la bendición de la muestra benéfica de belenes elaborados por el fraile capuchino Conrado Estruch, que “la gran revolución que hay que hacer hoy día es la de presentar a Jesucristo a todos los hombres”.
El prelado ha añadido que, “más allá de organizar planes estratégicos, lo realmente urgente y necesario es ayudar a que cambie el corazón de las personas, algo que en última instancia sólo puede hacer el Señor, de ahí que sea tan importante anunciarlo”.
“Convirtámonos también nosotros en un belén”, ha exhortado en este sentido monseñor Osoro, al explicar que los nacimientos son “una manifestación sencilla de que Jesús ha entrado realmente en la historia de la humanidad para salvarnos”.
Asimismo, el Arzobispo ha urgido también a los fieles a “escuchar el grito de los más pobres” y “atenderles en sus necesidades”. El prelado ha puesto como ejemplo de todo ello a fray Conrado Estruch por su “vida y su fe, su ayuda a los pobres y el amor que demuestra siempre a los demás”. Por ello, ha expresado que “si fray Conrado no existiera habría que inventarlo”.
Tras la eucaristía, en la que ha intervenido la coral de la parroquia de San Juan y San Vicente de Valencia, monseñor Osoro ha bendecido la exposición de belenes elaborados por el fraile capuchino, de 88 años, y el grupo de Amigos de San Antonio, fundado por el mismo religioso.
Último belén incorporado, en el ladrillo del ascensor
La muestra de belenes, que este año cumple su 19 edición, cuenta con más de mil nacimientos elaborados con materiales de desecho. Este año, la exhibición incluye belenes elaborados con materiales como juguetes, maderas, máquinas de escribir y de coser, calabazas, así como restos de material tecnológico en desuso, como ordenadores, radios o teléfonos móviles.
Entre los belenes que componen la muestra destaca la última pieza que fue realizada por Fray Conrado Estruch e incorporada a la exposición hace dos días. Se trata de un nacimiento elaborado en un pequeño ladrillo sobrante de la última reparación del ascensor del convento.
Los visitantes pueden adquirir los nacimientos a cambio de un donativo, que será destinado a la atención de las necesidades de más de 200 familias valencianas sin recursos, a la Casa Cuna Santa Isabel, al Cottolengo del Padre Alegre, a la asociación para la Defensa de la Vida Provida y a misioneros de la orden capuchina en Somalia, Guinea Ecuatorial, Bolivia, Colombia y Honduras.
La exposición está ubicada en el sótano del convento capuchino de San José en Valencia, sito en la calle Cirilo Amorós, 67, y permanecerá abierta hasta el 24 de diciembre en horario de mañanas, de 11 a 14 horas, y de tardes, de 17 a 19 horas.
VLC Noticias | Redacción. Fotos: M.Guallart /AVAN