El Péndulo | Jimmy Entraigües.- Montse Espinar es un escritora valenciana que encontró a través de la literatura una forma de expresarse y una manera de sentirse equilibrada con el mundo y con ella misma.
Autora de más de ciento veinte relatos, y con dos novelas en su haber y a punto de concluir una tercera, Montse Espinar ya se ha abierto un hueco en el amplio mundo literario con la obtención de varios premios en destacados concursos. También ha sido una de las escritoras integrantes de la antología ‘Cada mirada es única. Liberación de talentos’ perteneciente a los Talleres Literarios Luna de Papel y adscrita a la iniciativa ‘Libro, vuela libre’ coordinada por la profesora y coach en escritura creativa Aurora Luna.
Al hablar con Montse descubrimos una autora llena de sensibilidad y cargada de un futuro de palabras por volcar en el papel.
El Péndulo: ¿Cómo surge el deseo por escribir y poner sobre el papel tu mirada sobre el mundo?
Montse Espinar: Creo que es una necesidad. Es una pulsión que sientes en un momento determinado, tanto con las alegrías como con las penas. Es una pulsión que te arrastra a plasmar lo que ves, lo que sientes o lo que deseas. Yo no recuerdo mi vida sin la necesidad de escribir y poner por escrito las historias o los relatos que me interesan. El paso está cuando decide uno compartir lo que ha expresado y brinda sus textos a los demás. Creo que ese paso es el más difícil.
E.P.: Es cuando se rompe la frontera de la intimidad.
M.E.: Sí, claro que sí. Cuando uno escribe se conoce a sí mismo y lo naturaliza a través del texto y…, el problema está cuando se rompe ese pudor y dices ‘¿enseño lo que hago?’, ‘¿esto gustará?’… También está el tema de asumir las críticas o las opiniones contrarias de los otros. Cuando uno escribe y enseña su texto queda expuesto a los demás y ese paso es complicado porque te sientes como indefenso. Al final uno tiene que romper con esa frontera como muy bien dices. Te confieso que he tardado mucho tiempo en hacerlo pero…, fue liberador y muy enriquecedor.
E.P.: Siempre que alguien entrega una creación hacia los demás, sea de la disciplina que sea, deja de pertenecerle. La obra, de alguna manera, es de la otra persona.
M.E.: Sí. Uno aprende a disfrutar con esa entrega. La primera satisfacción es cuando uno consigue expresar lo que siente en el texto, saber que lo que deseabas plasmar está como tú querías. Esa es ya una primera satisfacción y…, luego cuando compartes ese texto, ese escrito… Compruebas que hay gente que lo entiende, que lo disfruta y siente casi las mismas cosas que tú cuando lo escribías. Esa satisfacción es enorme y recompensa mucho a quien escribe.
E.P.: Tras tu participación en la primera antología ‘Cada mirada es única. Liberación de talentos’ de la iniciativa ‘Libro, vuela libre’, veo que has obtenido dos primeros premios y tres segundos premios en varios concursos de relatos, ¿ya te sientes más segura en labor como escritora?
M.E.: La verdad es que ha sido una satisfacción enorme el haber conseguido algunos premios. Para mí ha sido muy importante. Te invita a creer en lo que haces, a querer seguir en ese trabajo de escritura y…, a ganar confianza en lo que escribes. Yo escribo rozando el extremo, la sensibilidad, las emociones y…, que haya gente que…, algo tan íntimo y que tanto me pertenece sea capaz de entenderlo, de sentirlo, de emocionarse y de compartir idénticas sensaciones a las mías pues… Eso me llena de alegría y me sube la moral.
E.P.: Digamos entonces que la primera liberación de talentos fue como el pistoletazo de salida para tus textos.
M.E.: Sí, sí. En realidad cuando yo empecé los talleres con Aurora Luna fue el primer paso y el paso definitivo para compartir y enseñar y…, pasar de la privacidad de mi casa a compartir con gente que no conoces tus textos. Fíjate que yo no enseñaba mis textos a nadie, ni a mi familia. El taller con Aurora fue fundamental, aprendí a compartir con mis compañeros mis escritos y…, cada vez compartía más y me iba uniendo a ellos de una manera distinta pero, al mismo tiempo, de una forma especial.
E.P.: Sabemos que estás preparando una tercera novela pero, ¿y las dos anteriores?, ¿vamos a poder conocerlas o las tienes en tiempo de espera?
M.E.: Bueno, sí que las dos anteriores las tengo escritas desde hace tiempo pero…, necesito detenerme en cada una de ellas y darles el toque final. Están terminadas pero creo que ahora, con lo que he ido aprendiendo los dos últimos años, que ha sido mucho, sé que puedo darles el toque que necesitan. En cuanto a la tercera novela va por el camino correcto y con las ideas y las estructuras correctas. Yo creo que cualquier artista, del género que sea, no da nunca por acabada una obra. Siempre hay algo por retocar así que tienes que prohibirte a ti mismo el seguir tocando la obra.
E.P.: ¿Y en qué géneros te sientes más cómoda?
M.E.: Pues me gusta mucho el género erótico y…, de hecho fue Aurora la que me aconsejó leer a Anaïs Nin, Marguerite Duras…, y a una serie de autores y autoras que me llamaron poderosamente la atención y…
E.P.: Es un género difícil y bonito a la vez.
M.E.: Es muy bonito y muy intenso. Me siento muy a gusto cuando escribo una historia intensa y pasional y…, bueno, toco un poco de todo, menos el humor que me resulta muy complicado pero…, también me gusta entrar en otros géneros y probar sacar provecho de la historia.
E.P.: El erotismo es un género que vive un buen momento editorial pero muchos de los libros caen en lo más habitual y superfluo y…
M.E.:… Yo busco el ritmo, necesito que haya un compás en cada página. Me da igual el género, necesito una melodía que acompañe cada párrafo y le dé sentido al texto.
E.P.: Las vivencias también son importantes.
M.E.: Sí, al final pienso que enmascarados en personajes, en momentos y en situaciones uno escribe lo que siente, lo que es y lo que vive. A veces es violento escribir sobre uno mismo y no resulta cómodo. Maquillamos de alguna manera las cosas para terminar hablando de las cosas que vivimos y sentimos.
E.P.: Conozco a varios escritores y escritoras que les encanta asistir a talleres y a cursos de escritura para renovar y refrescar sus conceptos e ideas, ¿estás de acuerdo con este ejercicio?
M.E.: Sí, sí, completamente. Es necesario y muy bueno renovarse y aprender cosas nuevas. Además inspira. Cuando estás con gente que escribe, eso se contagia y enriquece tu forma de acercarte al texto. Sí alguien quiere aprender a escribir o necesita refrescar su forma de escribir, lo más recomendable es que acuda a un taller y más si es como los que hace Aurora donde encuentras mil formas meterte en una historia o de salir de un conflicto en lo que estas escribiendo. En un taller te llenas de ideas y estás deseando llegar a casa para ponerlas sobre el papel.
E.P.: Pero, ¿qué motor te impulsa a escribir?
M.E.: Sobrevivir. He empezado esta entrevista diciendo que es una necesidad. Creo que soy una persona sensible y esta sensibilidad me hundiría en la miseria si no fuera capaz de sacarla al exterior. Necesito sobrevivir en este mundo que me ha tocado y la manera más sana y más hermosa de hacerlo es a través de la escritura. A mí me salva la escritura y necesito sobrevivir ejerciéndola.
E.P.: Gracias Montse por contarnos tus experiencias como autora y compartir con nosotros tu relación con la literatura. Te deseamos lo mejor con esas tres novelas que tienes en preparación y que sigas siendo tan entusiasta.
M.E.: Gracias a vosotros, ha sido un placer charlar y compartir este momento sobre literatura. Muchas gracias.