Impresionante tarde de fútbol en Mestalla, aún con el muslo de pollo en la garganta -lo de comenzar un partido a las 16:00 hay que hacérselo mirar- pero con un graderío, el de la afición del Valencia CF, entregada al ciento por ciento con su equipo. La llamada al valencianismo para convertir Mestalla en un infierno se cumplió con creces. El estadio daba miedo. Y más cuando se descubrió el tifo con el escudo de la ciudad sobre un gran fondo blanco. Impresionante.
Las camisetas del Valencia CF, si me apuran, también daban miedo. A falta de publicidad, los valencianistas lucieron en el pecho estampado el lema ‘Junst Tornem’. Toda una declaración de intenciones, el mejor Valencia CF ha vuelto y visto lo visto sobre el césped, el Atlético de Madrid no es rival.
Daba comienzo el partido y, sin tiempo para sentarse, el público que abarrotaba la grada tuvo que dar los primeros saltos. El equipo dirigido con Nuno salió mordiendo el césped, a un ritmo que los atléticos no podían seguir ni de lejos. En el minuto seis, fruto de la asfixiante presión valencianista, Miranda marcó en propia puerta ante una mala salida de Moyá -patética imagen, por cierto, la del guardameta en su vuelta a Mestalla, la que un día fue su casa-.
El ‘Cholo’ Simeone, desde la banda, no paraba de mover los brazos de arriba abajo intentando que sus pupilos bajaran el ritmo hasta el trote cochinero que mejor les va. Pero un Valencia CF enorme en defensa -con Otamendi como auténtico martillo al más puro estilo ‘Ayala’- y casi galáctico en ataque se comían a los rojiblancos en todas y cada una de las facetas del juego.
Así, casi a continuación del autogol de Miranda, André Gomes se sacó de la chistera un golazo digno del mismísimo Futre -sin ánimo de urgar en la herida atlética-. El luso entró en el área driblando a dos contrarios en zig-zag y disparando lejos de la manopla de Moyá. El esférico venía de los pies de Alcácer, autor de la otra mitad de una jugada para derretir los cedés viéndola una y otra vez.
Llegaba el minuto diez, el del dorsal de Mario Alberto Kempes, y el estadio entero se levantó para aplaudir en homenaje al ‘Matador’, que esta pasada semana salía exitoso de su partido más difícil: seis horas a corazón abierto en una operación en la que le instalaron seis by-pass. Mestalla no se olvida nunca de su embajador mundial y el ‘crack’ más importante que ha militado con la camiseta valencianista.
Solo faltaba el homenaje de su equipo de toda la vida, y el también argentino Otamendi se sumó al homenaje al marcar inapelable de cabeza al saque de un córner. Apenas habían transcurrido 13 minutos y los de casa ya mandaban en el luminoso por 3-0. Mestalla alucinaba con su equipo, y en particular con esta auténtica fotocopia del ‘ratón’ Ayala encarnada en Nicolás Otamendi. Inmenso, reinante en defensa, y desde esta tarde también de cara al gol, de cabeza como hubiera firmado el original en época de Benítez.
La grada es sabia. Desde el saque de centro atlético tras el gol de Otamendi, los aficionados entendían que era hora de quitar esa quinta marcha y bajar el ritmo, dejando que fueran los rojiblancos los que se vaciaran físicamente en busca de la reacción. El propio Nuno lo entendió y transmitió a sus jugadores la idea. Pero delante estaba el Atlético. Los últimos 15 minutos del primer tiempo fueron un continuo acoso atlético a la meta valencianista. Pero guardándola estaba otro ‘crack’: Diego Alves.
Al filo de la primera media hora, Tiago disparaba desde fuera del área para que Diego Álves rechazara el balón con una buena estirada, pero Mandzukic se adelantó a la defensa y acortó distancias en el que sería el último tanto del partido.
El Atlético, consciente de que podía ser su momento, puso cerco a la portería valencianista. Pero Otamendi se multiplicaba, dando la sensación de que ante él, o pasaba el jugador o el esférico, pero no las dos cosas juntas. Esto permitía al equipo seguir a lo suyo, tocando y tocando, con permiso de las botas rojiblancas, que comenzaban a salir a pasear con su habitual “tensión”, que es como llama ‘Cholo’ a sacar el hacha. Víctima de ello, el capitán valencianista, Parejo, al que el entrenador argentino debió señalar en el descanso como objetivo a destruir y Koke fue el encargado de hacerlo, a base de patadas. El ‘trencilla’ a cambio, solo mostró amarilla al jugador atlético, y eso tras merecer la roja en varias ocasiones.
Pasaban los minutos y todo seguía igual, para desesperación de Simeone y sus pupilos. Pero les quedaba el comodín del árbitro y vaya si lo utilizaron. En el ’43, el árbitro señaló penalti por manos de Gayá, en una jugada en la que el balón botaba hacia la mano del canterano y no al revés. El ‘trencilla’ parecía dispuesto a todo con tal de que el Valencia CF no ganara. Y por si había dudas, en la misma jugada mostraba amarilla a André Gomes.
Pero entonces emergía la figura del parapenaltis, Diego Alves. El brasileño, que le debió jurar en arameo algo al oído de Siqueira antes de irse a la línea de gol, detuvo con autoridad el disparo del delantero atlético. Mestalla se venía abajo, mostrándole al árbitro sus respetos con ese gesto en el que se usan los dos brazos, uno que se extiende y el otro que corta el viento.
No podrían con Mestalla ni el Cholo, ni el árbitro. Tras el descanso, el partido fue igual de intenso aunque el Atlético dio ya varios pasos al frente en busca de goles. Eso sí, con su táctica habitual de promover el antifútbol, cortando el ritmo de partido constantemente a base de marrullería y agresividad para, sacar de sus casillas al rival, ‘cazar’ faltas en las bandas y sacar petróleo de su peligrosidad a balón parado.
Así iba marcando territorio con la permisividad del árbitro que caía una y otra vez en la facilidad a la hora de caerse de los rojiblancos, más parecidos a las otoñales hojas que a hombres hechos y derechos.
Mientras, el Valencia CF se defendía con mucho orden, con mucha solidaridad entre los futbolistas ante un enemigo que sabe apretar el acelerador cuando la ocasión lo requiere. Aún así, Alcácer, al primer palo, a punto estuvo de hacer el cuarto con un desmarque al primer palo pero no controló el remate.
Pero este Valencia CF sabe sufrir y adaptarse al estilo de su rival. El Atlético provocaba faltas sin serlo y los de Nuno trabajaban al máximo, paraban el partido, lo aceleraban y chocaban con sus rivales con fuerza. La lucha táctica se imponía sobre las ocasiones que eran escasas, pero la emoción era increíble. Ambos equipos luchaban con intensidad por dominar lo indominable y el corazón prevalecía sobre la calma. Y Mestalla y su afición estaban achuchando a los suyos y al árbitro, empeñado en señalizar faltas y más faltas al Atlético.
Los últimos minutos fueron apasionantes con un gran Valencia CF que tuvo que sacar fuerzas para parar la máquina visitante que achuchó todo lo que pudo por marcar algún gol. Los cambios de Nuno dieron frescura y mayor combatividad si cabe. Orban, Filipe y Feghouli se integraron entre sus compañeros y le dieron aún más chispa a un equipo que va creciendo partido a partido y que está ilusionando mucho a su afición. Al final, victoria muy importante por 3-1 y Mestalla sigue siendo un fortín inexpugnable esta temporada. Cuatro choques en casa, cuatro triunfos, doce goles a favor y sólo dos en contra, Números, sin duda, para ilusionar.
Así no es de extrañar que el graderío ovacionara hasta diez minutos después de acabado el partido, obligando a Nuno y sus pupilos a devolver el saludo desde el centro del campo. Nuno ha conquistado Mestalla, sin duda alguna. Y lo ha hecho como gusta a la afición: con goles, con victorias y, sobre todo, con criterio futbolístico.
FICHA TÉCNICA
Valencia CF (3): Diego Alves, Barragán, Mustafi, Otamendi, Gayà, Javi Fuego, Andre Gomes (Filipe Augusto, m. 71), Parejo, Piatti (Orban, m. 62), Rodrigo y Alcácer (Feghouli, m. 74).
Atlético de Madrid (1): Moyá, Jesús Gámez, Miranda, Godin, Siqueira, Gabi, Tiago (Raúl García, m. 72), Koke, Arda Raúl Jiménez, m. 68), Griezmann (Cerci, m. 65) y Mandzukic.
Goles: 1-0. M. 6: Miranda en propia puerta. 2-0. M. 7: Andre Gomes. 3-0. M. 13: Otamendi. 3-1. M. 29: Mandzukic.
Árbitro: Teixeira Vitienes, del colegio cántabro. Amonestó a Andre Gomes; Parejo, Javi Fuego y Gayà del Valencia CF. Expulsó a Cerci por doble amarilla en el minuto 92.
Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada de la Liga BBVA, retransmitido por GolT. Gran entrada en Mestalla. La Banda Centre Artístic Musical de Moncada recibió al equipo, amenizó la FanZone y tocó en determinados momentos del partido.
VLC Noticias | Redacción. Fotos: Lázaro de la Peña / VCF