Los salarios cayeron de media en España un 1,5% en 2013 respecto al año anterior, un comportamiento peor al del conjunto de los países desarrollados, donde crecieron un promedio del 0,2% en el mismo período. Así lo ha explicado este viernes la portavoz de la Organización Mundial del Trabajo (OIT) en España, Rosalía Vázquez.
Además, esta especialista en Econometría y Salarios del organismo ha asegurado que en este país “los salarios se han reducido drásticamente mientras que la productividad ha seguido creciendo más o menos al mismo ritmo que en el resto de países, lo que significa que el poder adquisitivo de los trabajadores ha disminuido mucho más en España que en su entorno”.
“Existe un margen real para subir los salarios”
En consecuencia, el director de la oficina de la OIT en España, Joaquín Nieto, ha asegurado que en España “existe un margen real” para subir los salarios. “¿Cuánto deberían subirse los salarios? Pues tanto como lo permita la productividad, que ha crecido considerablemente en los últimos años”, ha precisado.
España fue, seguido por EE.UU., el país en el que más se incrementó la desigualdad entre 2006 y 2010, un alza provocada por la caída de los salarios y, sobre todo, por el aumento del paro, según el Informe mundial sobre Salarios de la Organización Mundial del Trabajo (OIT). Así, señala que el 90% del crecimiento de la desigualdad fue consecuencia “de las variaciones de la distribución salarial y las pérdidas de empleos”, según el estudio.
Si se analiza solo la desigualdad dentro de la clase media, en ese mismo período, España fue el segundo país con mayor aumento de las disparidades de ingresos, solo superado por Irlanda.
Además, el informe destaca que el nivel del salario medio real en España en 2013 fue inferior al de 2007, al igual que lo sucedido en otros países desarrollados como Grecia, Irlanda, Italia, Japón y Reino Unido.
“En España y EE.UU., los países donde más aumentó la desigualdad si ésta se mide comparando el 10% de hogares con mayores ingresos con el 10% de hogares de la franja inferior, las variaciones de la distribución salarial y las pérdidas de empleos determinaron el 90% del incremento de la desigualdad en España, y el 140% en Estados Unidos”, señala la OIT.
En el extremo opuesto están países como Brasil, Argentina o Rusia, donde se han reducido las disparidades de ingresos gracias a los mayores salarios y oportunidades de empleo.
Aumento salarial medio del 2% en todo el mundo
En cuanto al nivel mundial, el informe indica que los salarios no han recuperado todavía la evolución que tenían antes de la crisis, ya que crecieron de media un 2%, un punto porcentual por debajo de los incrementos que registraban en los años previos a 2008. En 2012, el promedio de aumento mundial fue del 2,2%.
Así, tras el avance de 2013, se estima que el salario medio mensual era de unos 3.000 dólares en las economías desarrolladas y de unos 1.000 dólares en los países en desarrollo.
“El menor crecimiento en 2013 respecto a 2012 se debe a multiplicidad de factores, entre los que destacan el decepcionante resultado de la recuperación europea y de la economía japonesa”, ha explicado la directora general adjunta de la OIT, Sandra Polanski, en una rueda de prensa.
La productividad crece más que los salarios
Respecto a la situación que viven los países más avanzados, llama la atención que el aumento de la productividad laboral -es decir, el valor de bienes y servicios producidos por cada trabajador- está superando en los últimos años a la subida de los salarios.
Según la OIT, ese creciente desajuste entre salario y productividad se ha traducido en que una proporción cada vez menor del PIB se destina al trabajo, mientras que una parte cada vez mayor va al capital.
Esta tendencia significa que los trabajadores están obteniendo una parte más pequeña del crecimiento económico y los propietarios del capital reciben mayores beneficios.
Fuerte alza salarial en China y frenazo en Latinoamérica
China determinó gran parte del crecimiento salarial mundial debido a su tamaño y al crecimiento del salario real en el país. Si se excluyera al gigante asiático, el aumento salarial mundial se reduciría casi a la mitad, pasado del 2% al 1,1%, destaca el estudio.
De hecho, el modesto crecimiento de los salarios en 2013 a nivel mundial fue impulsado por las economías emergentes, donde los salarios registraron un aumento del 6,7% en 2012 y del 5,9% en 2013. En cambio, el crecimiento promedio de los salarios en las economías desarrolladas fluctuó en alrededor de 1% anual en los años anteriores a la crisis y, desde entonces, se ha desacelerado aún más hasta llegar a solo un 0,1% en 2012, y un 0,2% en 2013.
El estudio -basado en datos de 185 países- constata grandes diferencias entre una región y otra, ya que los salarios crecieron un 6% en Asia y un 5,8% en Europa Oriental y Asia Central, mientras que el avance se limitó al 0,8% en América Latina y el Caribe, donde el alza había sido del 2,3% en 2012.
“La tendencia general en América Latina refleja lo que ocurre en Brasil, el gigante de la región, donde los salarios crecieron con dígitos altos en los últimos años y cayeron un 1,8% en 2013”, ha explicado Patrick Belser, principal autor del informe.
El informe señala que los salarios son la fuente principal de ingreso de los hogares en los países desarrollados, emergentes y en desarrollo, sobre todo, en aquellos hogares con ingresos medios. Sin embargo, el 10% de las personas con ingresos más altos y el 10% que tiene ingresos más bajos dependen más de otras fuentes de renta.
En las economías en desarrollo, donde el trabajo por cuenta propia es más frecuente, la contribución de los salarios a los ingresos familiares es generalmente más baja, oscilando entre, por ejemplo, un 50% y 60% en México, Rusia, Argentina, Brasil y Chile, un 40% en Perú, y un 30% en Vietnam.
VLCNoticias|Redacción