Las excavaciones han permitido delimitar mejor el perímetro y extensión de las Ollerías Menores, zona alfarera de Paterna en la época medieval
Una parte significativa del municipio de Paterna tiene la declaración de zona de protección arqueológica debido a la riqueza de restos enterrados bajo sus calles. Paterna, situada a las orillas del río Turia, ha sido un punto importante de asentamiento humano desde hace milenios, como demostró la aparición de la Villa Romana en la zona Los Molinos, datada entre el siglo I a. C. y el siglo V, o el poblado de la Edad del Bronce de la Lloma de Betxí, en La Vallesa. Todo ello ha dejado una valiosa herencia oculta bajo las calles y edificios de la actual Paterna. Por ello no es de extrañar que cualquier obra en el municipio, ya sea para la construcción de viviendas o bien para la mejora de las infraestructuras subterráneas, suponga la aparición de hallazgos arqueológicos. Las excavaciones son vigiladas y, si se detecta la aparición de objetos o fragmentos, éstos se extraen cuidadosamente para su posterior limpieza, clasificación y entrega al museo arqueológico municipal donde se restauran, si es posible, las piezas originales y se exponen los objetos de más valor.
Miquel Navarro, de Aguas de Paterna; el arqueólogo municipal, Ernesto Manzanedo, y la concejala de Cultura y Museos, Inmaculada Rodríguez.
La empresa Aigües Municipals de Paterna, formada por el Ayuntamiento de Paterna y la empresa Hidraqua, ha invertido en el periodo 2006-2013 un total de 14 millones de euros en actuaciones de ampliación y mejora de las redes de agua, saneamiento y, en especial, de evacuación de aguas pluviales en todo el término municipal de Paterna. Los arqueólogos Francisco Baixauli Moreno y Eduard Sanchis Zarzo, presentes en estas actuaciones, manifiestan que “han aparecido diversas estructuras de la antigua trama urbana de la ciudad de Paterna, desde época medieval hasta nuestros días provenientes de las destacadas alfarerías de Paterna en el contexto medieval europeo. Dichas obras han supuesto la aparición de piezas arqueológicas que, recogidas en más de 500 cajas, están a disposición de los arqueólogos municipales para su estudio, conservación y catalogación.
Diferentes piezas aparecidas durante las excavaciones.
Mención especial requieren las obras de construcción del colector de la calle Manises. Sólo en esa actuación se recogieron aproximadamente el 80% de las piezas encontradas. Azulejos cerámicos, piezas decoradas de todas las tipologías, usos y funciones, como cántaros, jarritas, candiles, escudillas, tinajas, orzas… en definitiva material típico de vajilla y almacenamiento de líquido y grano. La decoración “muestra contextos bajomedievales y modernos de los siglos XIV al XVI, con alguna intrusión de tipo romano y griego, aunque esto último es prácticamente testimonial”, apuntan los arqueólogos.
Diferentes piezas aparecidas durante las excavaciones.
La concejala de Cultura y Museos, Inmaculada Rodríguez, destacó que “la aparición de todos estos hallazgos nos ha permitido obtener un conocimiento más preciso de la extensión del barrio alfarero de las Ollerías Menores”. Los servicios arqueológicos constatan que si bien las denominadas Ollerias Menores se consideraban circunscritas a la plaza del mismo nombre, las excavaciones realizadas en estos años han confirmado la sospecha de que cubrían una extensión mucho mayor, hasta el punto de que incluso podrían haber estado conectadas con las denominadas Ollerias Mayores, ubicadas en la zona de Los Molinos y Santa Rita. “En este sentido, cualquier excavación supone un incremento notable de la información que tenemos, incluso las que son estériles, pues nos permite delimitar mejor el perímetro de la industria alfarera medieval de Paterna”, apuntan desde el Servicio de Arqueología. Aunque después de cuatro o más siglos enterrados, la mayor parte de las piezas aparecen rotas, de las excavaciones se ha logrado encontrar tres tinajas completamente enteras, así como diversas piezas cerámicas. El paso del tiempo permite hallar desde piezas de iconografía árabe, mudéjar y cristiana, reafirmado una vez más coexistencia de culturas del municipio.
Piezas cerámicas presentes en la exposición “Caminar sobre el passat. De la terra al Taulell”, del Museo de Cerámica.
De este modo, la aparición de un “león rampante”, figura recurrente del periodo gótico, se combina con piezas escritas todavía en lengua árabe, elaborada por aquellos artesanos mudéjares que siguieron siendo maestros artesanos en Paterna tras la llegada de la Cristiandad, manteniendo su lengua y escritura. En el Museo de Cerámica, cargados de paciencia, los miembros del Servicio Municipal de Arqueología se afanan en la puesta en valor de estas piezas, trabajando sobre ellas como si de un inmenso puzzle de un número casi infinito de piezas se tratara. Algunas de estas piezas ya están integradas en la exposición temporal de azulejería bajo-medieval y moderna denominada “Caminar sobre el passat. De la terra al Taulell”, que se exhibe en el Museo Municipal de Cerámica de Paterna en la actualidad.
Piezas acumuladas en cajas a la espera de proceso de limpieza y catalogación.
El ingeniero responsable de Aguas de Paterna, Miguel Navarro, explica que “es para nosotros un motivo de satisfacción poder contribuir a la recuperación del patrimonio histórico de Paterna a la vez que nos preparamos para el futuro con mejores infraestructuras. Por ello, cada uno de nuestros proyectos lleva asociado su correspondiente seguimiento por parte de arqueólogos contratados a tal fin y supervisión por el servicio arqueológico municipal.
VLC Noticias | Redacción