Rusia inicia el reclutamiento de voluntarios con discapacidades musculoesqueléticas para probar los primeros exoesqueletos de fabricación nacional para uso médico.
Un exoesqueleto es una máquina móvil que un individuo puede llevar unida a partes y miembros funcionales del cuerpo humano, permitiéndole mejorar e incrementar su capacidad móvil y de carga con la ayuda de mecanismos robóticos computarizados. Los exoesqueletos rusos cuestan una fracción de lo que valen sus equivalentes de fabricación occidental y podrían cambiar la vida de miles de personas discapacitadas
“Tuve que estar yendo a rehabilitación durante tres años después de caerme por unas escaleras y sin embargo aún no puedo caminar”, dijo la pintora Yekaterina Románova, una de los más de cien voluntarios presentados a las pruebas que comenzarán este otoño, en declaraciones al diario ruso ‘Izvestia’. “Con el exoesqueleto caminaré sin ayuda y podré salir a comprar pinturas para mis cuadros sin tener que pedirle ayuda a nadie”, añadió.