Casi a punto de cumplir 30 años de vida, desde que se publicó por primera vez allá en 1985, ‘La Guía del Cine’ (Editorial Cátedra) se convirtió (y aún sigue siéndolo) en una complemento indispensable para los aficionados, amantes y profesionales del séptimo que buscan entre sus páginas el título, la referencia, el director o el año de algún filme del período silente o el más pegado a la década actual.
Con muy bien criterio tanto Cátedra como Carlos Aguilar revisitan la obra para confeccionar una quinta edición corregida y aumentada en cuanto a nuevas películas y directores sumando cerca de 26.500 entradas en sus más de 2.000 páginas.
Si para muchos ya suponía una obra completa y casi totémica que repasaba los filmes que, de alguna u otra forma, habían llegado a las salas españolas o bien habían llegado al espectador desde el mercado del videocasete, el DVD, los festivales o la televisión, la nueva versión, sin dudas, podría considerarse totalizadora, ya que se sitúa entre las mejores, más completas y más complejas guías de cine a nivel mundial.
Junto al hecho de considerarse una auténtica obra de referencia, ‘La Guía del Cine’ también destaca por algunos de los ácidos y mordaces comentarios que Carlos Aguilar inserta a las entradas de los títulos de las películas que conforman este gigantesco diccionario/guía. A través de ellos descubrimos (y en algunos casos compartimos o no), las filias y las fobias que el autor siente frente a una obra, su creador o sus intérpretes. Así conoceremos que el director Michael Haneke o el realizador Quentin Tarantino no son, precisamente, autores a los que Aguilar profese admiración.
Más allá del punto de vista personal de su autor, ‘La Guía del Cine’ sigue siendo una obra ejemplar y admirable y un libro que transmite amor y pasión por el cine que no solo entretiene en su lectura sino que nos aproxima a títulos y realizadores de cinematografías distantes como una invitación para ver y disfrutar de un cine con mayúsculas.
El Péndulo de VLCNoticias/Jimmy Entraigües