Javier Gázquez
Experto en marketing online
Uno de los momentos clave cuando decides abrir un negocio online es diseñar la página web a la que accederán tus clientes para realizar sus compras. La manera en que la estructures determinará que cuando se acceda a ella, los usuarios localicen con más o menos rapidez aquello que desean. Diseña una web fácil de manejar y apuesta por la usabilidad.
Antes de empezar es muy útil hacer una recopilación de todo aquello que quieres mostrar en tu página. Un forma de hacerlo es organizar el material por temas y productos que te permitan poco a poco ir esbozando de manera gráfica la estructura definitiva. Por ejemplo, si eres una imprenta online seguramente ofrecerás servicios de impresión de tarjetas de visita. Mira la composición de este apartado: http://www.imprentaonline24.es/17-imprimir-tarjetas-de-visita ¿No te parece que está bien definido?
Una buena forma de dar en la diana es hacer diferentes bocetos y enseñarlos a posibles usuarios. Observa sus reacciones y escucha sus opiniones porque seguro que puedes sacar información valiosa y útil para mejorar algunos aspectos que habías pasado por alto.
La home o página de inicio es la carta de presentación no sólo de tu web sino de tu empresa. Intenta captar la atención al máximo, piensa en tu público objetivo y pon bien visibles los contenidos que quieren ver. Es importante que en la página de inicio dejes claro a qué te dedicas y qué ofreces.
Un tema importante es el menú de navegación. A partir de la estructura primera que has creado. ¿Qué secciones son las que más contenido tienen? Seguramente esas son las más importantes a la hora de incorporar en tu menú principal y que además deberían aparecer en todas las páginas para que el usuario pueda navegar fácilmente.
Es fundamental que sepas escoger el tipo de estructura más acorde a tu negocio virtual, así como una plantilla que sea útil para tu negocio, el diseño no lo es todo.. Hay varias opciones desde la que parte de una página principal y va enlazando con otras que al mismo tiempo dirigen a otras de valor inferior, hasta aquella estructura en donde no existe página principal y todas se sitúan en el mismo nivel. También puedes optar por una mezcla de ambas. En cualquier caso, la estructura tiene que ser muy lógica y ninguna página debe quedar sin enlace a otra. Si esto pasara podrías estar desperdiciando una posible compra porque el usuario menos aventajado no sabrá como volver y entrará en otra web donde le resulte más fácil navegar.