Se va una leyenda valencianista. A sus 35 años, el que fuera crack del Valencia CF, el argentino Pablo Aimar, ha anunciado que se retira de la práctica del fútbol.
Desde que se marchara del Valencia CF camino del Real Zaragoza, el ‘pibe’ más inmortal de Mestalla no volvió ya a ser nunca el mismo jugador que había maravillado a medio mundo con su toque, sus regates, sus goles imposibles. Una serie interminable de lesiones le hicieron pasar sin pena ni gloria por el fútbol maño para luego militar en el Benfica portugués, donde tampoco le acompañó la suerte, y finalmente, trompicones arriba y abajo, acabar sus días en el equipo que le vio nacer para el fútbol internacional: River Plate.
Pero Pablito, a quien en Argentina se conoce más como ‘el payaso’, no puede más. En su River del alma, Pablio tampoco tiene lugar. En la nueva lista de River que ha confeccionado el técnico Marcelo Gallardo para disputar lo que queda de la Copa Libertadores, aparecen los flamantes refuerzos, pero con una significativa ausencia: la de Pablo Aimar. El de Córdoba, que dista mucho de estar en su plenitud física, fue descartado por el entrenador, y esa decisión aceleró el final de su actividad profesional.
El tobillo derecho, en el que el jugador lleva ya tres intervenciones quirúrgicas, no para de darle molestias, y ha llegado el momento en el que Pablo ha dicho ‘basta’. Deja el fútbol, y con él se va un alto exponente de la magia en los pies, de la clase y la distinción elevada a los altares futbolísticos que dieron al estadio de Mestalla cientos de tardes de gloria. Se va el otro ‘pibe inmortal’.
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