El Péndulo | Javier Furió.- Hace algún tiempo, dejar Valencia para pisar la capital era el único síntoma de éxito posible. Alguien podía destacar en casa, pero necesitaba ser reconocido fuera para obtener la importancia que merecía. Aun contando con una extensa trayectoria a sus espaldas.
En un mundo mucho más deslocalizado que el de aquellos años, cualquier persona ubicada en la ‘periferia’ nacional puede disfrutar de ofertas más inspiradoras que las de tener que coger el AVE a diario. Pero el epicentro de algunas actividades culturales concretas sigue siendo el mismo. Y acabas teniendo que desembocar allí donde está todo el mundo.
Verónica Mejía fundó hace 15 años Dance Center. Introdujo en tierras levantinas el hip hop. Formó (y sigue haciéndolo) a bailarines que hoy salen cada día al escenario en musicales de Londres o Los Ángeles. Y democratizó la danza de tal manera que gente con sobrepeso o mayor de 50 años ha dejado atrás sus estigmas para dedicarse a quemar energía en la actividad que siempre quisieron disfrutar.
Asimismo, cada poco tiempo es requerida por escuelas de Inglaterra e Italia, donde no sólo forma sino absorbe también las tendencias y las implanta en una ciudad que, si bien no se erige en la gran referencia nacional en este ámbito, sí gana día a día un peso mayor.
Fruto de ello son los varios años que ya aparece como fijo en los carteles el Urban Beat, la mayor concentración de baile de España que cada mes de junio aglutina a más de 1.000 personas durante 10 horas sobre los escenarios de La Rambleta, juzgados por jurados profesionales procedentes de todo el planeta.
Madrid como siguiente paso
Pero hay un momento donde sabes que, en casa, ya lo has hecho todo. Y que necesitas demostrar que no sólo puedes dirigir una escuela o un gran acontecimiento, sino que tu talento da para coreografiar cualquiera de las obras que pueblan los carteles de la Gran Vía.
El final del año 2015 y el inicio de 2016 se postulan como clave para que, en plena madurez, la valenciana dé por fin el salto al panorama nacional. Hasta ahora, siempre ha conseguido abrir el camino a aquellos que se lo pidieron y prepararlos para exigencias de esta índole. Pero, tras su etapa de formadora, llega el momento de su era como directora.