Una impactante retrospectiva de escultura hiperrealista que tiene su primera parada en el Museo de Bellas Artes de la Ciudad. La escultura hiperrealista toma cuerpo en el Museo de Bellas artes de Bilbao. Piezas que reproducen sobrecogedora exactitud los pliegues de la piel, las gotas de sudor, las uñas, el cabello, abrazos que se sienten y arrugas que traspasan. 50 años en una muestra con lo más representativo de este movimiento de finales de los años 60 del siglo pasado.