La Presidenta del Consejo General de Colegios de Farmacéuticos de España, Carmen Peña, acompañada por una parte del Comité Directivo, se reunió ayer, 25 de marzo, con los miembros del Consell Valencià de Col·legis de Farmacèutics, para reiterar su apoyo a la farmacia valenciana y para analizar las consecuencias de la Ley 2/2013, de actuaciones urgentes de gestión y eficiencia en prestación farmacéutica y ortoprotésica, que pretende imponer a las oficinas de farmacia las condiciones mínimas para las prestaciones farmacéuticas.
Los representantes de los farmacéuticos consideran, con estudios jurídicos de alto nivel, que le ley podría vulnerar el derecho a la seguridad jurídica consagrado en la Constitución Española, y también el derecho a la negociación colectiva, ya que permite que se pueda llegar a acuerdos con las oficinas de farmacia a nivel individual.
No obstante, tanto la presidenta del Consejo General como la del Consejo Valenciano, María Teresa Guardiola, consideran que, a pesar de todo, hay que regresar a la línea de negociación abierta y franca que ha sido la tónica general en los conciertos que se han suscrito con los diversos consellers en la Comunidad Valenciana, gracias a la que se han conseguido acuerdos pioneros en la prestación farmacéutica española, como la implantación de los genéricos en 1996 o el desarrollo de la receta electrónica.
Los representantes de los farmacéuticos valencianos han destacado el enorme sentimiento de unidad que ha despertado la ley entre los titulares de las oficinas de farmacia de Alicante, Castellón y Valencia, manifestado en las sucesivas reuniones comarcales realizadas en los Colegios y su disposición a seguir con la negociación colectiva, ante la desprotección evidente que supondría una concertación individual.
VLC Ciudad/Redacción