La producción de calefacción y agua caliente representa una gran parte de los consumos energéticos de los hogares valencianos durante los fríos meses de invierno y las facturas energéticas suelen dispararse en esta época del año para mantener a los hogares confortables. La gran mayoría de los sistemas de calefacción domésticos instalados en la Comunidad Valenciana utiliza gas natural o gasóleo como combustible, y el precio de ambos recursos naturales ha venido experimentando fuertes altibajos a lo largo de los últimos dos años debido a la actual situación geopolítica mundial, con conflictos bélicos ocurriendo en regiones productoras de petróleo y gas como Rusia y Oriente Medio.
Durante el año 2022 el precio del gas natural registró máximos históricos multiplicando hasta por seis su precio medio histórico. Si bien el precio del gas natural ha bajado desde entonces, los factores que causaron la subida del mismo siguen presentes (principalmente las tensiones geopolíticas y conflictos bélicos) y algunos expertos advierten que la única razón que impide que se viva una situación similar a la del año 2022 es el hecho de que las reservas de gas natural se encuentran en máximos en el continente europeo.
Por esta razón, para estar preparados ante una posible subida de los precios de la energía en cualquier momento, es conveniente que los hogares valencianos implementen medidas y prácticas de ahorro energético este invierno, principalmente aquellas relacionadas con los sistemas de calefacción que, como ya se ha mencionado, consumen una gran parte de la energía de los hogares durante esta época del año. Entre otras, algunas de las medidas y prácticas de ahorro que se pueden implementar son:
-Intentar reducir el consumo de agua caliente poniendo atención a, por ejemplo, la duración de las duchas o el tiempo que se tiene abierto el grifo al lavar los platos, al afeitarse, al lavarse los dientes o las manos. Para este propósito es muy útil también instalar atomizadores en los grifos, los cuales introducen aire a presión en el chorro produciendo un agua burbujeante que con un 50% menos de agua y consumo de energía proporciona una misma sensación de caudal y mojado total. De la misma manera, poner el lavavajillas a funcionar solamente cuando esté lleno y, en caso de que cuente con un lavavajillas moderno, comprobar si realmente es necesario prelavar los platos o no ya que con la mayoría de lavavajillas actuales no es necesario el prelavado.
-Llevar a cabo el mantenimiento preventivo rutinario de calderas y calentadores de gas. Las operaciones de mantenimiento preventivo son necesarias para eliminar suciedades y desechos que puedan estar provocando una combustión ineficiente en los sistemas de calefacción y una incorrecta transmisión del calor al agua. El mantenimiento preventivo de los sistemas de calefacción domésticos consiste en inspecciones y revisiones. Las inspecciones, conocidas como “inspección del gas”, la realizan las compañías de gas y con ellas se comprueban las instalaciones de gas en su totalidad. Las revisiones, por otro lado, se enfocan exclusivamente en la caldera o calentador de gas y deben realizarse de acuerdo a las instrucciones del fabricante. Por ello, las revisiones las deben realizar técnicos especialistas en la caldera o calentador de la marca en concreto. Por ejemplo, si la caldera o calentador que se tiene es de la marca Chaffoteaux, contactar con un servicio técnico Chaffoteaux Valencia garantizará un servicio de revisión profesional y siguiendo todos los pasos indicados por el fabricante en sus manuales de instrucciones.
-Normalmente la temperatura de funcionamiento de los calentadores de gas puede regularse entre 35 grados y 60 grados. Regular la temperatura de funcionamiento del calentador de gas entre 50 y 55 grados es más que suficiente para poder obtener agua muy caliente para el uso y para ducharse. En cualquier caso, evitar dejar la temperatura de funcionamiento establecida en el nivel máximo, ya que esto provocará un calentamiento excesivo del agua y un derroche de energía y de gas.
-Además de la temperatura de funcionamiento del calentador de gas, también es necesario regular el caudal de agua que entra dentro del mismo. Normalmente, los calentadores están diseñados para calentar 10 litros por minuto y si le entra un caudal mayor al calentador, el agua no podrá calentarse debidamente, resultando en un malgasto de energía. Para regular el caudal de agua, normalmente se puede conseguir a través de la instalación de un sensor de caudal o caudalímetro.
-Finalmente, podría ser sensato considerar la sustitución del sistema de calefacción por gas (caldera o calentador de gas) por un sistema de calefacción y ACS por aerotermia. La aerotermia es una tecnología joven que está de moda actualmente y que paulatinamente está sustituyendo a los sistemas de climatización y calefacción tradicionales. Los sistemas de aerotermia tienen la capacidad para producir agua caliente, calefacción y refrigeración en una sola tecnología y aunque el precio de un equipo de aerotermia suele ser relativamente elevado, estos equipos consumen apenas un 20% de energía en comparación con una caldera de gas.
En conclusión, el precio de la energía podría volver a dispararse en cualquier momento, por lo que podría ser necesario volver a implementar medidas de ahorro y eficiencia energética. Siendo los sistemas de calefacción domésticos en los hogares valencianos calderas y calentadores de gas y gasóleo en su mayoría, la aplicación de las medidas descritas arriba garantizará un gasto de energía mesurado y eficiente.